EL CORONEL NO TIENE QUIEN LE ESCRIBA

EL CORONEL NO TIENE QUIEN LE ESCRIBA

Pese a los reclamos de su mujer, para El Coronel el gallo representaba algo más que lo económico, siendo este aspecto el más importante para su esposa dadas las necesidades que tenían.

Aun cuando El coronel trataba de tener los ojos abiertos le gano el sueño, su mujer continuaba con sus reclamos llegando al punto de moverlo para que le contestara. La mujer insistía en qué podían hacer si no podían vender nada, mientras que El Coronel tenía puesta su confianza en el triunfo del gallo durante la pelea en el mes de enero ya que si pasaba eso les pagarían el 20% la misma tarde de la pelea. No obstante la mujer tenía presente que así como es probable que gane, también es probable que pierda el gallo, sin embargo en eso no pensaba El Coronel ya que para él era un gallo que no podía perder para lo cual su mujer le sugería que pensara en esa opción pero esto no era importante para él, debido a que faltaban todavía cuarenta y cinco días para empezar a pensar en eso. Esto desespero a la mujer a tal grado que sacudió a El Coronel al mismo tiempo que le decía que mientras tanto qué iban a comer; El Coronel, sintiéndose invencible en ese momento le respondió ¡Mierda! Mostrando con ello el sentir del Coronel en su vida, su pasado y su futuro dado que él siempre ha puesto su esperanza tanto en el gallo como en el correo que pudiera tener el aviso de su pensión.

LOS CACHORROS

Después de haber sufrido esa decepción amorosa Cuellar regreso a las andadas, todo con el fin de impresionar a Teresa. Todo esto favoreció a que Cuellar cayera otra vez en depresión ya que se daba cuenta de las diferencias que tenía respecto a sus compañeros, lo cual lo orillo a no encontrar una salida y por lo tanto a perder las ganas de vivir por la desesperación.

Debido al estilo de vida que llevaba Cuellar pierde el contacto con sus amigos a los cuales verá por casualidad en las calles y acontecimientos sociales, percibiendo que a sus ellos les fue bien en la vida. Mientras tanto él, llevado por la ira decide competir en una carrera la cual fue otro momento triste ya que la pierde al chocar en las curvas del Pasamayo con otro competidor, terminando así con su vida, y teniendo con ello un triste final.

NUESTRA SEÑORA DE PARÍS

Al irse a la catedral, Quasimodo lleva a Esmeralda a lo más alto del campanario de Nuestra señora de parís, ya que también él amaba a la hermosa gitana. Aunque Frollo apoyado por otras personas logran asaltar la catedral para rescatar a Esmeralda sin embargo Quasimodo desde lo más alto arrojo piedras y plomo hirviendo logrando así que se detuvieran. Esto no impidió que Frollo burlara la vigilancia y que los soldados se llevaran a Esmeralda a la cárcel entregándola a

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