ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

EL VALOR DE LA VIDA


Enviado por   •  1 de Diciembre de 2013  •  909 Palabras (4 Páginas)  •  242 Visitas

Página 1 de 4

EL VALOR DE LA VIDA

Introducción:

¿Se puede dar alguna definición a la palabra vida?, según nos han enseñado en Biología, vida es la capacidad de nacer, crecer, reproducirse y morir.

Esta definición se me hace como muy apática, pero si, así es, nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos, como cualquier ser viviente en el planeta sólo que la gran diferencia entre todo ser viviente y nosotros los seres humanos es que tenemos la capacidad de raciocinio, tenemos sentimientos, experimentamos diferentes emociones (alma y espíritu) que nos fueron dados en la imagen y semejanza que recibimos de DIOS.

Esto nos da la capacidad de darle un “valor a la vida” para enriquecerla y disfrutarla, apreciarla realmente, ó bien cumplir solamente la función biólogica, pues también tenemos la capacidad de decidir, o sea el libre albedrío que igualmente nos fue dado por Dios.

Y ese valor a la vida es lo que en mis vivencias personales aprendí y trataré de definirlo en los siguientes párrafos.

Desarrollo.

“Un día desperté en un hospital, en el suelo, eran las tres de la mañana, tenía mucho frío, trataba de hacerme bolita para acurrucarme y darme calor yo misma, me dolía todo mi cuerpo, me levanté y me acerqué a la cama y me quedé mirando a mi hija Natal, dormía por los sedantes que le habían inyectado.

¿Dios mío, por qué?,

-¡Perdóname, perdóname!, porque yo tengo la culpa de que ella esté aquí.

-¡Yo, solo yo!, no la supe amar, yo la llevé a ésa desesperación, yo la desquicié, perdóname…”

Este fue un momento de hace cinco años, donde estuve varios meses con mi hija en el Hospital General la Raza en la ciudad de México, fueron momentos muy dolorosos, que marcaron mi actual existencia, porque desde esos instantes empecé a darle un verdadero valor a la vida.

Valoro la vida al despertar, abro mis ojos, ¡estoy viva!, puedo mirar, estoy completa, mi esposito está aquí a mi lado

Me levanto contenta, feliz y voy al cuarto de mis hijos, aquí están, todavía duermen, pero estoy aquí con todos ellos, no en el hospital, eso ya quedó atrás.

Nataly, mi hija, cada día está mejor, la amo, agradezco a Dios su perdón y su misericordia, me ha dado otra oportunidad de vida!,

Ahora agradezco la casa donde vivo, porque ahora Dios lo hace un hogar, con su gran amor.

Ahora valoro la vida en mis hijos, tal vez puedan ser un poco flojos, tal vez algunas veces discutamos nuestros propios puntos de vista, pero aquí están, ¡vivos!

Estudiando, creciendo, aprendiendo de sus propios errores, sé que pueden caer, pero Dios me ha enseñado que El los cuida, que yo no soy su dueña que son prestados en este proceso de vida, por eso valoro ahora cada momento, cada instante, cada sonrisa,

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (5 Kb)
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com