ENSAYO ACERCA DE Es que somos muy pobres

“Somos constructores de nuestro propio destino”

Por: Angeles Estefania De anda Rosas

El problema del futuro de la vida de una persona puede ser criticado por otras, sin saber en realidad cómo dicha persona se siente. A través de este ensayo del cuento “Es que somos muy pobres” perteneciente al libro El llano en llamas del escritor Juan Rulfo se pretende analizar bajo un ángulo ontológico porque la familia de Tacha juzgaba su futuro, lo tenían casi previsto sin en realidad saber si sería como ellos decían. ¿Por qué el padre de Tacha mantiene esa mentalidad de que Tacha terminará como sus dos hermanas? ¿Por qué la madre no hace nada para alentar a Tacha a que no acabe como sus hermanas? ¿Por qué el hermano de Tacha tiene el mismo pensamiento que sus padres?

        De acuerdo al principio del área filosófica de Ontología, según la RAE (Real Academia Española), ésta es la parte de la metafísica que trata del ser en general y de sus propiedades trascendentales. De modo que el ser del padre de Tacha era mantener ese pensamiento de que su hija menor terminaría igual de mal como sus dos hermanas. No tiene que ser así, debería de buscar alguna forma de ayudar a su hija, tratar de encontrar otro modo de que Tacha pueda tener algo para que un hombre la vaya a querer de verdad. O simplemente ayudar moralmente a Tacha, darle ánimos e intentar tener una mentalidad positiva.

        Del mismo modo, la madre de Tacha, debería de cambiar la idea que tiene sobre el futuro de su hija en vez de sólo lamentarse del destino al que se han enfrentado las dos anteriores. Sin embargo, tal vez ella tiene esa mentalidad y no hace nada para remediar la situación ya que es muy común que en lugares como éste pueblo las personas sean un tanto anticuadas, y la mujer nunca contradiga la palabra del hombre.

“El sabor a podrido que viene de allá salpica la cara mojada de Tacha y los dos pechitos de ella se mueven de arriba abajo, sin parar, como si de repente comenzaran a hincharse para empezar a trabajar por su perdición.”

                                            (Es que somos muy pobres, Juan Rulfo)

Así pues, de acuerdo a la parte anterior citada del cuento, al saber que es el hermano de Tacha el que cuenta la historia, se puede saber en este fragmento del texto que él de la misma manera que los padres piensa u opina de igual lo mismo sobre el destino de Tacha, aunque no tiene algún derecho para opinar sobre el futuro de su hermana.

Pero, Tacha podría también intentar cambiar su propio futuro, ponerle un alto a los pensamientos de sus padres, intentar cambiar sus ideas, o por lo menos darse ánimos ella misma, tratar de no mentalizarse con lo que sus padres ven en su futuro. Cada quien puede dirigir su vida hacia dónde quiere llegar.

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