El Banquete o sobre el bien, Platón
majrojas27 de Mayo de 2014
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El Concepto de Belleza de Platón y Aristóteles
“La Belleza es la única cosa por
la que vale la pena vivir”
El Banquete o sobre el bien, Platón
1. Introducción
Este breve ensayo tiene por objeto reflexionar sobre algunos puntos importantes en las consideraciones del concepto de Belleza, que son al mismo tiempo considerados como sus reflexiones estéticas, tanto Platón como de Aristóteles. En primer lugar lo que hay que aclarar, es que en los dos autores no hay un tratamiento propio de lo que hoy denominamos como “estética”, empero observaciones filosóficas que hoy consideramos pertenecientes a ese campo, se encuentran de diversos modos en sus respectivos sistemas.
Las preguntas acerca de qué es lo bello, consideraciones acerca del arte y de la poesía, reflexiones acerca de la experiencia estética aparecen tratadas en diversos momentos de sus respectivas obras. Este trabajo pretende situarse en un aspecto fundamental, que me parece muy interesante contraponer en uno y otro pensador, que es: El concepto de Belleza. Puesto que me parece que las ideas que se puedan generar a partir de pensar estos tres conceptos en Platón y Aristóteles, pueden generar conceptos interesantes para la reflexión estética.
Uno de los más importantes elementos que se deben tener en cuenta, puesto que configuraban el horizonte de pensamiento, es que los griegos no usaban la palabra arte. Ellos decían Techné, y estas incluían tanto la escultura, como la agricultura, la carpintería, la pintura, la zapatería, el alfarero, etc. Es decir no existían un concepto como el moderno de arte, todas eran técnicas. Un techné es en definitiva un saber hacer algo, un saber hacer que es fundamentalmente imitativo, es decir las artes son miméticas tanto para Platón como para Aristóteles, imitan la naturaleza.
De estas consideraciones solo se salva la poesía, ya que la poesía es una técnica pero a la vez, la poesía por antonomasia viene de una especie de rapto divino, el poeta es un poseso, que cuando es poseído habla por los dioses, hay una divinidad que habla por él, en este sentido el poeta no solo tienen una techné, ya que como dice Aristóteles en la Poética: “Cualquiera es buen versificador”, por lo que la poesía es más que solamente un conocimiento de cómo hacer, es una poiesis que implica estar poseído por una “locura divina” como dice Platón.
Finalmente quisiera agregar que este ensayo, por las limitaciones propias del autor y del espacio, no puede ser un análisis minucioso de los conceptos que discutiré, se pretende como un esbozo que ayude a echar luz para entender mejor las concepciones sobre la Belleza, puesto que ya lo decía Platón: “Difícil cosa es lo bello”.
1. El concepto del Belleza
Definitivamente es más fácil hacer un análisis de lo que Platón consideraba como belleza, de lo que Aristóteles considera como tal. Y esto no es debido a que la filosofía platónica sea más comprensible que la aristotélica, lo que sucede es que Platón si aborda el concepto de lo bello como un concepto fundamental de sus reflexiones, en cambio, cuando Aristóteles se pone hablar de lo bello lo hace de un modo un tanto ecléctico y esporádico, por lo que es más difícil reconstruir su concepto que el platónico.
1. La belleza para Platón
1. Hacia una formulación del concepto de belleza
Debido a la gran cantidad de obras de Platón que poseemos y a que sabemos su orden cronológico, podemos establecer como su concepto de belleza fue evolucionando y cambiando. Platón se preocupó mucho por sistematizar el concepto de lo bello y sobre todo por rescatarlo del relativismo subjetivo al que lo habían reducido los sofistas. Para el filósofo ateniense, el concepto de lo bello, va a tener un carácter fundamental en su pensamiento filosófico. Ahora me propongo mostrar cuál era este punto y en qué consiste lo bello para Platón.
Quizás podríamos comenzar diciendo, como margo general para hacer un análisis de la idea de lo bello en Platón, diciendo que en la filosofía platónico lo sensible tiene un carácter casi peyorativo, pues lo sensible es una mera copia, una sombra imperfecta de la verdadera realidad, la realidad pues son las eidos o formas que son los modelos perfectos a partir de lo cual todo lo sensible fue hecho, puesto que el mundo tangible es mutable, cambiante, imperfecto debe existir ese mundo de las formas perfecto, eterno e inmutable. Una de las ideas más fundamentales para Patón, es justamente lo bello pues es una de las formas más perfectas y altas que existen.
1. La belleza y la Utilidad
En el diálogo del Hipias mayor es el primero en el cual Platón se pregunta acerca del concepto de lo bello, para ello enfrenta a Sócrates con uno de los más reconocidos sofistas de su tiempo Hipias y ambos empiezan a discutir sobre lo que es la belleza. Frente a la propuesta de Hipas que la belleza es lo que provoca placer a los oídos y a la vista, dependiendo del placer que provoque en el sujeto, la belleza es algo completamente relativo al sujeto que la percibe. Platón, defiende la tesis que supuestamente es la más fiel a Sócrates de acuerdo al testimonio Jenofonte, Sócrates dice que la belleza es lo conveniente, esto es aquello que se adapta mejor al momento y al fin para el que fue Hecho.
Sin embargo cabe señalar que el Hipias mayor es como el Teetetes, uno de los diálogos apodícticos, estos son diálogos en donde solo se deje introducida la discusión y no se puede alcanzar un concepto definitivo, esto diálogos se supone eran utilizados como materiales para el debate y la discusión dentro de la Academia.
Pero lo que sí se puede observar es que ninguna de las definiciones ensayadas es completamente satisfactoria, pues platón está convencido que la belleza tiene existen en sí y por sí misma, es decir es un ser objetivo.
1. La Belleza como proporción y medida
En muchos de sus diálogos de madurez platón se va a hacer partidario de la definición pitagórica de la belleza, donde ésta es entendida como la medida armónica de las formas de los objetos. Lo interesante es que para Platón esta proporción, como para los pitagóricos, no solo es una propiedad cualitativa de la disposición de las partes de los cuerpos, sino que es al mismo tiempo cuantitativa, es decir sujeta de matematización.
Entonces para Platón lo más bello que podemos conocer sensiblemente son las figuras geométricas y por ello es que estas se convierten en mediadores, daimones, entre el mundo de las formas y el mundo sensible. Puesto que siempre guardan una simetría y una armonía perfectas, puesto que aunque el círculo que vemos dibujado sea ligeramente imperfecto, nos remite inmediatamente a nuestra idea de círculo, que es perfecta. Por ello es que el filósofo debe de aprender geometría, pues le enseña a prepararse para el mundo de los eidos.
En uno de sus diálogos posteriores, el Timeo, Platón va a defender la idea de que existen cinco figuras tridimensionales que por su regularidad son perfectas, cada una de estas figuras representa uno de los elementos que conforma el mundo, puesto que Dios al ponerse a hacer el mundo solo pudo utilizar las medidas perfectas, por lo tanto el cosmos debe estar construido según esos modelos perfectos. Nos dice en el Timeo: “…En efecto, si este mundo es bello y bueno su creador, es evidente que miraba hacia lo eterno2”.
Vemos aquí la gran raigambre pitagórica de Platón, para quien las figuras geométricas son bellas, justamente en virtud de que son armónicas y proporcionadas, estas son uno de los reflejos más cercanos del mundo ideal. Las figuras geométricas, a diferencia de las cosas de la naturaleza, tienen una belleza y una armonía perfecta e inmutable, no están sujetas al decurso de las cosas de la physis. Por ejemplo una persona puede ser bella pero esta belleza sensible desaparecerá con el decurso temporal, en cambio la belleza de las figuras geométricas se mantendrá eternamente.
1. La existencia de una verdadera belleza, la “anamnesis”
Vemos entonces que para Platón la belleza debe ser UNA, no puede ser ambivalente, pues todo lo que en este mundo es bello, lo es porque participa de la belleza. Es decir, la belleza que percibimos en el mundo es una comprobación, un reflejo de la verdadera belleza.
Pero ¿Cómo tenemos noticia de la existencia de esta Belleza? Platón en Menón y un poco en el Fedro desarrolló su famosa teoría de la anamnesis, podemos reconocer la belleza porque en algún momento nuestra alma tuvo contacto con la idea de la belleza, sin embargo olvidó todo al caer en el cuerpo.
Por ello, y esto es hermosísimo, el Eros es una fuerza que mediante la contemplación de lo bello, puede hacernos ascender a la idea de la belleza. El Eros, el amor, es un camino que conduce hacia el recuerdo de la existencia de esa verdadera belleza, en un hermoso fragmento del Fredo escribe Paltón:
“…En las imágenes de aquí abajo no hay resplandor ninguno de la sabiduría ni de ninguna otra cosa que tiene valor para las almas. Sólo pocos, acercándose a las cosas, ven a duras penas mediante los órganos oscuros el modelo originario que se reproducen esas copias. En cambio, en aquel entonces la belleza se veía en su esplendor y, en el seno de un coro feliz, teníamos de ella una visión y contemplación beatífica, mientras nosotros íbamos en busca del Θεως y otros en busca de otros dioses, y nos iniciábamos en aquella iniciación que es justo llamar la más beatífica, que celebrábamos siendo íntegros y estando intactos de los males que nos esperaban en el tiempo que habría de venir, contemplando en la iniciación mistérica visiones íntegras, simples,
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