El Grado De Jarrón Azul

Es en Ricks Logging & Lumbering donde Bill Peck nos deja claros algunos puntos a destacar sobre ser un auténtico buscavidas, llevemos todo bajo el lema “LO VOY A CONSEGUIR” que es la llave que muchos deberíamos utilizar no solo en el ámbito de los negocios si no en nuestra vida diaria, tomemos los estándares de calidad que se esperan de nosotros y pulvericémoslos, creemos nuestras propias marcas y destrocémoslas día con día, es un buen ejemplo el que podemos tomar de Peck, destaquemos el buscavidas que llevamos dentro.

Es la determinación de nuestras acciones y el curso que les demos sin descanso para crear una imagen de liderazgo positivo en rendimiento constante, está bien que nos enseñen día con día a ser un Henderson pero solamente está en nosotros hacer de un director y líder al estilo Peck, se puede tomar el ingenio, la inventiva, la creatividad y la iniciativa como un buen comienzo para llevar las directrices de proyectos a niveles mas altos, es en las personas fieles y de valores donde se encuentran los buscavidas trascendentes que se necesitan en todo momento.

Si bien es cierto que Cappy Ricks y la prueba a Peck podrían tomarse como la ejemplificación misma de la vida diaria, porque la misma diariamente nos pone pruebas, muchas parecerán tan absurdas y desquiciadas tanto que existe el sentimiento de tirar la toalla antes de ver el oro al final del arcoíris, pero la misma determinación, y lealtad no solo a las peticiones, la nula posibilidad de fallar en una tarea, es fácil justificarse por las acciones no hechas, posiblemente se quebrara el pazo pero la intención y la finalidad realizada son las que nos podrían convertir en el próximo director de una oficina en Shanghái.

En todo momento se destaca la importancia en la fijación de objetivos, cumplimiento de metas y el compromiso para derrocar los obstáculos que se puedan presentar en las tareas. Durante el transcurso de la lectura Bill nos va mostrando las lecciones importantes, todas las actitudes que como buscavidas se deben emplear en las tareas para el éxito, nunca darse por vencido y sobre todo manejar con astucia cada movimiento a la par de los inconvenientes mostrados y las posibles frustraciones que se puedan crear en el trayecto a la cumbre de una meta ya que por supuesto Bill Peck no se limitó a cumplir con la cuota de picea blanca, la visión como lo dice se fija más allá del panorama común al que se está acostumbrado, para poder vislumbrar las mieles de un trabajo bien hecho. Ahora, ¿Cómo es que una persona imposibilitada a medias logra agotar las posibilidades en la búsqueda de superación del reto?, porque sin duda una “h” podría hacer notar la delgada línea que nos puede llevar vertiginosamente del éxito al fracaso y viceversa, pero más tajante la diferencia aun, ¿Porque nosotros no?, las capacidades con las que somos dotados para la realización de tareas y superación de obstáculos nos dan las puertas abiertas a llevar al buscavidas interior a limites inimaginables.

La similitud de la lectura a la vida empresarial es una enorme metáfora del perfil profesional tan codiciado y anhelado por las organizaciones, el truco esta en miras más lejos no más cerca, si uno puede comprender el impacto que genera la inventiva de nuestras acciones día con día se podría tener un empoderamiento de lo importante que es conseguir los objetivos, para destacar que la sociedad en que nos desenvolvemos es un enorme sistema en flujo que conlleva al equilibrio de la misma, podemos concientizar que si la eficacia de las empresas contacta con la satisfacción del cliente estamos llegando al punto de calidad a lograr para la beneficiación de un todo y es precisamente aquí donde denota cada movimiento que lleva Peck acabo, podemos aplicar el agotar recursos, el sobrepasar los estándares, la lealtad, la brecha entre un Handerson y un Peck, para llevar el jarrón azul a nuestro destino.

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