El Ojo Del Espectador

¿Alguna vez has sido engañado por lo que ves? La respuesta para esta pregunta sería un "sí" casi seguro. Uno de los grandes males de la sociedad es el prejuicio.Es importante reconocer que la mayoría hemos fallado en esto. Todos los días somos engañados por la vista y es por eso que debemos comenzar a combatir este error de juzgar por lo que vemos.

Uno de los conceptos que se puede utilizar para explicar el engaño de nuestra vista sería la ilusión óptica. La misma lleva a percibir la realidad de manera distorsionada a través de la vista. Esa distorsión puede ocasionarse por cuestiones fisiológicas (mediante una estimulación excesiva en los ojos o en el cerebro) o cognitivas (según la forma en la que percibimos las cosas). Todos hemos sido engañados por la vista y se podría decir que todos hemos juzgado alguna vez por lo que vemos. El problema no es tener tu propio criterio sobre algo, el problema es juzgar sin bases ni fundamentos. Cuando se juzga de esta manera se convierte en prejuicio… Por lo tanto, se pudiera decir que el prejuicio es una opinión previa acerca de algo que se conoce poco o de lo cual no se conoce nada. Los prejuicios en la sociedad son una manera de etiquetar a las personas, esto gracias a las primeras impresiones. Lo que estas generan, tristemente, suelen ser percepciones negativas de las personas. Sin duda podemos equivocarnos a la hora de etiquetar a las personas. Jesucristo dijo en Mateo 23:27 (RV60): "¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia". Quizás algo nos parezca hermoso, pero no es correcto confiar completamente en lo que percibimos porque es engañoso. Esos escribas y fariseos tenían apariencia de rectitud pero su vida estaba llena de mentiras. “No todo lo que brilla es oro” y es por esto que se debe nutrir el conocimiento para poder opinar acerca de algo.

En fin, debemos practicar la justicia y la equidad a la hora de juzgar y evitar ser engañados a la hora de percibir las cosas. Salomón -mi escritor favorito- dijo: "La hermosura es engañosa, la belleza es una ilusión, ¡sólo merece alabanzas la mujer que ama a Dios!". Cometemos el error de dejarnos dirigir por lo que nos parece hermoso… Un grave error. En el asunto de no dejarnos llevar por apariencias también debemos aplicarlo en el ámbito sentimental -en cualquier ámbito- , mejor dicho. Hay caminos que el hombre cree que son de rectitud, pero terminan siendo senderos de la muerte. Por tanto, hay que tener cuidado en los lugares por los que transitamos. Aprendamos a escucharlo todo y retener lo bueno. Aprendamos a observar las virtudes de las personas y no sus defectos. No demos ver y escuchar lo que nos conviene sino ser sinceros...

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