Historicidad De Jesus Y Los Evangelios

LA HISTORICIDAD DE JESÚS

En 1878 unos albañiles mientras trabajaban encontraron una piedra grande, pero no le dieron importancia ya que tenía una inscripción que ninguno de ellos entendía. Años más tarde la inscripción en esta piedra que establecía una norma jurídica sobre la inviolabilidad de los sepulcros, fueron el motivo para que Franz Gumont se ocupara de estudiarla. Es así como empezó una investigación histórica sobre Jesús, no solo siendo un acontecimiento aceptado por la fe sino también comprobado por la razón. Esta investigación tuvo consecuencias positivas ya que fortalecieron la fe en la resurrección de Cristo y se logró el desarrollo de la teología.

En la actualidad se puede conocer la vida de Jesús por medio de los evangelios, los cuales fueron plasmados primero en pequeños escritos, para luego ser utilizados en la redacción de cada uno de los evangelios. Por otro lado, las fuentes extra bíblicas tienen mucha importancia, ya que también constituyeron la compilación conocida como Biblia.

Con el paso del tiempo surgió mucho interés por el conocimiento de Jesús, llegándose a determinar la fecha aproximada de su nacimiento, lugar de nacimiento que es Belén, el comienzo de su vida pública, su muerte y su resurrección.

LA HISTORICIDAD DE LOS EVANGELIOS

La confianza a los escritos referidos a la vida de Jesús disminuyo en un tiempo determinado, motivando a los hombres al análisis histórico de ellos. Uno de estos escritos son los evangelios que a pesar de la variedad de significados sus narraciones contenidas coinciden con las enseñanzas de Jesús.

Con el paso de los años se ha descubierto quienes escribieron el evangelio gracias a numerosos testimonios antiguos, hoy en día muchas personas lo saben con solo leer la Biblia.

Mateo escribió para los judíos quienes esperaban la venida del mesías, Marcos para los romanos presentando a Cristo como el conquistador poderoso, Lucas para los griegos mostrando a Cristo como el ideal del hombre perfecto y Juan escribió para los creyentes de todas las naciones presentando las deidades más profundas sobre la verdad de Cristo y el espíritu santo. Mateo y Juan fueron Apóstoles de Jesucristo, es decir, testigos directos de la vida y enseñanzas de Jesús; mientras que Marcos y Lucas no fueron apóstoles, sino discípulos de algunos de ellos. Además cabe mencionar que el evangelio de Marcos, Mateo y Lucas son considerados sinópticos, porque nos dan un resumen de los mismos acontecimientos.

Por otro lado es importante saber que las variantes encontradas en los evangelios han llevado a algunos a dudar de su veracidad. Esto se debe a que los escritores nunca pensaron escribir una biografía histórica de Jesús, sino que interpretaron los hechos y las palabras de Jesús con la gracia del espíritu santo y los escribieron.

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