La existencia y la monotonía

La existencia y la monotonía

“Estamos condenados a ser libres”, nos dice Sartre. Pero, las acciones que cometemos relacionan directamente a los que nos rodean; el existencialismo nos dice que el hombre y la cultura se forman y se complementan mutuamente. Hoy en día nos encontramos inmersos en una sociedad atrapada en la monotonía de la rutina, que consiste en nacer, crecer, producir bienes, consumir y morir, tal como el modelo capitalista nos lo ha inculcado. Entonces, siendo esto así, ¿cómo puede el hombre ser libre dentro de esta cultura que no lo deja ir más allá de lo estipulado? ¿Cómo puede existir dentro de ella?

Claramente el hombre debe de buscar sus propios medios para poder avanzar y cumplir sus metas, pero a menudo la presión y a frustración que le genera la rutina monótona bajo la cual nos regimos actualmente, lo lleva a tomar decisiones extremas tales como el suicidio que, evidentemente va en contra de los pensamientos existencialistas que Sartre nos heredó.

Y, es en las situaciones difíciles, que nos ponen bajo presión y en las críticas de los demás en las cuales vemos nuestro verdadero objetivo y el camino correcto para poder seguir adelante y encontrar la libertad a la cual estamos sujetos desde que nacemos, pues es así como logramos crear nuestras propias opiniones acerca de la vida y empezamos a vivirla tal como queremos, sin afectar la existencia de los demás. Puesto que “todo ha sido resuelto, excepto cómo vivir” y desde aquí empieza nuestro derecho y deber a la libertad.

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