Mayo 68

UMSNH-FPBA: Licenciatura en Artes Visuales

Estructuralismo y posestructuralismo

Prof. L. F. Chpír Etétzi Sánchez García

27 de noviembre de 2015

Comentario crítico a: Mayo del 68 nunca ocurrió de Gilles Deleuze.

Diego Anthar Espinosa Carmona.

El autor en el texto, Mayo del 68 nunca ocurrió, empieza haciendo referencia hacia la Revolución de 1789 y la de 1917 en Francia, tienen características determinantes y causas propias, pero comparten la rebeldía y la inconformidad de una sociedad ante su estado gobernante o sus condicionantes sociales, ambas determinadas por una alegoría del poder.

Ante estos movimientos existe la necesidad de la autoridad de esparcirlos hasta ahogarlos, pero aun logrado esto, ante el propio acontecimiento de la insurrección y la necesidad de lucha se abre el camino hacia una posibilidad de cambio, emergiendo desde el interior individual hacia la sociedad.

Es así como en mayo de 1968 en la capital Parisina surge un movimiento denominado “… puro, libre de toda causalidad normal o normativa.”^[1] Ya que el movimiento emerge desde un rincón, como si fuese una especie de ventana de luz en donde pareciera que la sociedad se da cuenta de toda la carga de frustración y disgusto, y viese una nueva forma de superarlo, de tener en si una mejora social; el movimiento nace y se desarrolla crecientemente entre los habitantes de la capital desarrollando a su paso una conciencia, conciencia de su existir, de su estar y de sus condiciones sociales, pareciese que de pronto se da cuenta de todas esas limitantes que lo envuelve. El movimiento no solo arrastra a grandes masas, sino que además forma una coalición organizada deseosa de este cambio e integrada intelectualmente por estudiantes y profesorado de la universidad de parís.

Posteriormente el texto nos indica que ante éste movimiento la sociedad francesa no ha sido aun en nuestros días capaz de superar lo acontecido “en mayo del 68 no fue consecuencia de una crisis, ni reacción a una crisis. Más bien lo contrario. La crisis actual, los actuales impasses de la crisis francesa, derivan directamente de la incapacidad de la sociedad francesa para asimilar mayo del 68.”^[2] El habitante actual pareciese estar procreado para la preocupación solo personal y a la producción que se la ha sido asignada, ya que pareciera ser que toda aquella propuesta de cambio está completamente prevista para ser apagada, esfumada o clausurada como lo maneja nuestro autor.

Los hijos generacionales de los que vivieron y pertenecieron a este movimiento, se encuentran en una situación de indiferencia, pese a que la información y educación tiene una mayor repercusión en nuestros días, esa necesidad de la protesta y exigencia se ha nulificado casi en su totalidad, aun con la conciencia de que todas las reformas que se implementan de alguna forma están contra de ellos y esto no solo es un problema de Paris, sino de alguna forma de puede contextualizarse de forma global. Europa en general no tiene en estos momentos una propuesta sólida y parcial, Francia por lo tanto al parecer solo tiene la intención de formar junto con un grupo de países una sociedad Europea que reafirme una determínate económica.

Desde mi punto de vista, mayo del 68, es uno de los movimientos importantes dentro de la historia social de la humanidad, ya que no solo repercute de forma definitiva en el comportamiento social de Francia, sino que genera un efecto en el comportamiento mundial.

Esta lucha no surge con la búsqueda del poder, sino que la lucha estaba enfocada a la igualdad y la libertad, al reconocimiento del estudiantado como parte de una sociedad y la inconformidad ante una colectividad conservadora,  es por esto que el movimiento tiene características inusuales, del cual nadie era capaz de creer y del que se forma una de las concepciones ideológicas más importantes el siglo XX en Europa, del cual queda la impresión que generando las condiciones adecuadas puede volver a formarse; el resultado que esto generó no solo fue en Francia, si no que se logró extenderse a países fuera de este continente.

Ante el movimiento suscitado los partidos de izquierda de Paris, no respondieron a los primeros llamados de las manifestaciones ante la inusual falta de estructura del pensamiento. Las primeras confrontaciones entre los manifestantes y la policía crea una serie de barricadas, generadas principalmente por árboles y autos, autos utilizados simbólicamente ante el cansancio y el significado de éste ante el sistema capitalista y la industrialización que representaba, la utilización de adoquines y la extracción de ellos de la plazas públicas también de alguna forma genera una significación en contra de estos sistemas implantados y del que se buscaba escapar.

Los medios de comunicación jugaron un papel muy importante ya que la información se distribuyó a todas las plataformas, la reproductibilidad hace que ésta se haga de forma masiva lo que otorga una mayor preparación del qué y porqué de las manifestaciones. Es así como este acontecimiento empieza a tener un eco importante en varias sociedades, “Fue el momento más álgido de un año que en Vietnam, Washington, Berlín, Tokio, Praga, México, Atenas y otros muchos lugares, conmocionó el mundo entero y volvió a poner de actualidad la necesidad y la posibilidad de la revolución. Abrió, además, una brecha a través de la cual movimientos como el feminista, el ecologista, el antimilitarista o la contra-cultura recrearon nuevos frentes de lucha  que se unieron al ya viejo combate contra la explotación capitalista”^[3].

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