Mecanismo

Este ensayo presenta algunas orientaciones psicoterapéuticas, y va dirigido, a todas las personas interesadas en saber, el por que de algunos comportamientos; también a terapeutas, los cuales entienden que la buena relación profesional-cliente, es esencial en toda intervención; ya sea de orden psicosocial, psiquiátrico o psicológico.

Así mismo, encontraremos un tema apenas tratado en los manuales de psiquiatría y de psicología clínica, el cual es; los mecanismos de "defensa" los cuales al ser de naturaleza "reactiva", se convierten en verdaderas armas o mecanismos de "agresión", convirtiéndose con facilidad en mecanismos "violentos".

Los mecanismos de defensa, cuando son naturales, hacen parte de los rasgos o formas del carácter, el cual ante situaciones determinadas se activa, llegando a dar forma a la personalidad.

Lo corriente es que hagamos uso de mecanismos de defensa, los cuales mediante la adaptación, tienden a impedir la neurosis, o el sufrimiento de orden moral.

Los mecanismos de agresión, perturban en general las funciones y las relaciones con el medio; convirtiéndonos en verdaderos neuróticos; y en consecuencia tiranizamos las relaciones, y el entorno, haciéndonos fácilmente personas violentas.

Las relaciones entre personalidad, mecanismos de defensa, mecanismos de agresión, carácter, prejuicios, trastornos y formas de abordaje; no son planteadas en este texto, como un enfrentamiento entre el saber psiquiátrico, psicosocial, psicológico y el saber médico, mas bien proponen una visión ecléctica, con un objetivo común.

El trabajo conjunto de profesionales en salud mental, y el uso de medicamentos recetados por el médico psiquiatra; abren un interesante campo, no solo en el aspecto de efectividad, sino que demuestran una mayor preocupación en el trabajo integral.

Estamos en la obligación de descubrir, que definir a una persona, es un trabajo un poco complicado y es por la misma razón, que no podemos alegremente etiquetar, por uno o dos síntomas; las personas somos más que síntomas, patologías y conductas, también somos, psicosocio productos, tal cual.

Muchos de los denominados mecanismos de defensa, son verdaderas "armas", usadas sobre todo por personas débiles; se sirven de ellos para escapar a su propia verdad. Prefieren vivir en el engaño a reconocer su limitación. Para salvar su precario prestigio, echan mano de cualquier recurso a fin de hacer creer que la culpa de un fracaso cualquiera no es nunca suya.[7]

Reciben este nombre, una serie de procedimientos o habilidades que utilizamos todas las personas, con el fin de evitar la angustia o la ansiedad que nos producen las frustraciones neuróticas y los conflictos psíquicos delirantes.

Los mecanismos tienen algunas características generales.

(A)

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