Método de la secante.

La vida es simple, nosotros no.

Escrito por Elmundosinporques 31-01-2016 en Cosas de la vida

Es lo más normal del mundo, ya sea en la universidad, el colegio, el trabajo, en una salida con amigos, en algún punto de la vida que alguien se queje de cuán difícil puede ser su vida.

Vivimos en el mundo de las quejas y lamentos. Es que... ¿Acaso todos olvidaron hacer algo para cambiar las cosas que tanto les molestan en vez de solo quejarse?

Vamos, quejarnos está bien, es un placer de la vida. ES UN DERECHO. El problema es vivir con ese derecho presente y creerlo la base de nuestro mundo. Llega un punto en la vida, donde tenemos que forjar con nuestras manos el destino.

Lamentablemente no he llegado a ese punto. Y sigo aquí, quejándome de un hombre. ¿Es que no me canso de esto?

¡Pues claro que sí! Pero no logro pasar a la otra etapa. Así que, decidí empezar un blog. Me recomendaron tener un Hobby, y siempre he pensado que escribir es una gran forma de desahogarme. Un blog solo para mí,donde nadie nunca se enterará de todo esto, por lo menos no alguien que conozco.

Si algo me gusta es mi pensamiento. Pienso todo, y luego creo nuevas teorías sobre lo que pensé. También hago lo mismo con los acontecimiento de mi vida; los pienso y los vuelvo a pensar para crear teorías. Así que soy una chica a la que le gusta pensar, y eso me agrada. Pero, no todo lo que brilla es oro. Si estoy como estoy es porque mi mejor cualidad, es mi peor defecto.

Puedo ser muchas cosas en la vida, buenas y malas, pero lo que más me molesta de mí:

    -"Mi bondad"

    -Pensar tanto que nada tiene sentido, genero demasiadas teorías respecto a un hecho.

La vida es simple, nosotros no. Si estás igual que yo, y te molestan tus cualidades, amiga o amigo, estamos fritos. La vida es simple, nosotros la complicamos. Eso es lo que me trajo aquí. 

Me gusta pensar, pero me complica todo. Soy esa clase de persona que no reacciona en el momento a algo. Tiendo a dejarme llevar por el momento, bailo en la lluvia, bailo una canción en el carro y la canto con el corazón (al diablo los vidrios, ¿Quién los necesita?), me dejo llevar por un beso, soy libre. La maldición aparece después, cuando me llamo al orden y, el arrepentimiento (?), aparecen en mi vida.

¿Por qué alguien besa a un amigo de toda la vida si no hay más futuro que arruinar lo que sea que tengan? Pero peor, ¿quién besa a su amiga de toda una vida para después (de varios besos y cosas) decirle que él no la merece y que nunca funcionaría aunque le guste? ¡Qué acto más cobarde! Lo peor es que la joven puede que tenga sentimientos por él, antes, durante y ahora. Todo apunta a un mal final.

Cuando algo así pasa, nosotros somos los culpables, los soñadores que nos permitimos soñar sin miedo al fracaso, los que preferimos darlo todo porque creemos que algo puedo puede salir. ¡Pues claro! Nosotros complicamos todo pensando. Porque el pensar es una cualidad como un defecto, es un cualfecto. Cuando nada tiene sentido, seguimos tratando de darle un porqué. Deberíamos parar el acelerador de la mente, la cual parece que pisa más fuerte que nunca para maquinar nuevas ideas absurdas y explicaciones para hacernos sentir mejor.

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