Valor Y Ser

CONCEPCIÓN METAFÍSICA Y ANTIMETAFÍSICA DE LOS VALORES:

Los griegos nos hablaron de los valores con su nombre etimológico axia axios es ahí cuando se empieza a derivar todo acerca de los valores otra cosa que pensaban los griegos que al igual era muy importante para ellos era en la belleza justicia verdad santidad

Concibieron "valores" como algo separado o separable de unas cualidades propiedades inherentes a las realidades mismas, ya fueran las humanas o las no humanas

Hasta la fecha el valor se a conceptualizado como el ser mismo Suelen darse ciertamente tendencias a la hegemonía de un valor sobre todos los demás, ante lo cual reaccionan los "purismos" de toda índole.

Esto así corresponde a que el ser no es bueno ni malo es neutro o neutral los valores no los ponemos nosotros mismos como personas no necesitamos de algo o de alguien para poder tener una valor cualquier humano tiene la capacidad para poder tener cualquier valor.

Platón ve este tema de una forma distinta desde otro Angulo por así decirlo el dualismo lo que cambia o no cambia lo que hace diferente a dos mundos él pone de ejemplo valores y bienes a decir de los evangelizadores, Dicho de otro modo toda realidad vale por igual

Íntimamente ligado a este problema, está el del reconocimiento del cambio de todos los valores y la manera en que ha solido entenderse o interpretarse este cambio, que

Montaigne hacía expreso diciendo:

"¿Qué clase de valor es ése que con sólo cruzar las aguas de un río se convierte en su contrario?

A lo largo de sus páginas queda expuesta la propia filosofía positiva de Nietzsche. La idea principal de la obra es el "superhombre"; Nietzsche afirmaba que es algo que debe ser superado, es un puente, no un fin". Zaratustra es una figura simbólica de la nueva filosofía que el autor pretendía desarrollar.

Nuestro conocimiento se enlaza en función de dos divinidades artísticas, Estos dos mundos tan diferentes marchan uno al lado del otro, dando a luz nuevos frutos.

Analogía sexual  se muestran apareados entre sí y en ese apareamiento acaban engendrando la obra de arte a la vez dionisíaca y apolínea de la tragedia ática

El hombre sensible contempla con minuciosidad y gusto al arte, sacando de las imágenes que surgen en el sueño para armar su propia interpretación de la vida. Y no son sólo imágenes agradables y amistosas las que él experimenta, también las cosas serias, oscuras, tristes y tenebrosas, toda la “divina comedia” con su “infierno” desfila ante él. El hombre vive y sufre en esas escenas.

Así ha descubierto el bien y el mal de muchos pueblos. Zarathustra no ha encontrado poder más grande sobre la tierra que las palabras bueno y malvado. Ningún pueblo

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