Análisis de fuente Abelardo y Eloísa

ANÁLISIS DE FUENTE ABELARDO Y ELOÍSA

Juliana Victoria Serna Duque
Historia Medieval
Universidad de Caldas

Para entrar a analizar las cartas de Abelardo y Eloísa es vital dar una apertura de como era la concepción de higiene y sexualidad en la Edad Media; temas ya abordada en la sesión 10 a partir de la lectura de María Teresa Miaja de la Peña. “Los sentidos y el placer en el Libro del buen amor”. Es allí donde podemos observar como el amor tiende a ser la trasgresión de las normas morales, eclesiásticas y sociales de la época. Además, de cómo la iglesia durante la edad media asociaba el placer al pecado y a la carne, llevando a éste así a las características opuestas a las espirituales. También se puede percibir el constante afán de la iglesia por normar la conducta y los apetitos de sus fieles. Y por la otra parte la naturalidad de los hombres por la búsqueda del placer no necesariamente asociado al pecado. Es allí donde se entrará a relacionar las cartas de Abelardo y Eloísa donde se cuenta con tal sentimiento el cómo se enamoró de Eloísa.

En las cartas de Abelardo y Eloísa se observa la narración de Pedro Abelardo de las diferentes situaciones que vivió desde su nacimiento en Le Pallet hasta la traición de sus monjes. Y tiene como fin dar consuelo y alentar a un amigo ausente, es por esto, que cuenta sus propias calamidades. En sus numerosas desdichas, cuenta con tal sentimiento como se enamoró de Eloísa una jovencita que tenía el conocimiento de las letras y esto la distinguía de todo el reino. Y como Abelardo aprovecha tal situación para entrar a la vida de Eloísa ofreciendo al tío de la joven compartir sus conocimientos con ella a cambio de hospedaje.
Se acerca a ella inicialmente con un trato amistoso para así llegar más fácil a ella.

Abelardo narra: ‘’primero nos juntamos en casa, después se juntaron nuestras almas’’1 siendo alusivo a como se dejaron llevar por ese amor y como este amor los llevaría a satisfacer sus deseos carnales. Es decir, dejando fluir esa naturalidad de los hombres por la búsqueda del placer. ‘’abríamos los libros, pero pasaban ante nosotros más palabras de amor que de la lección’’2 cuenta como estaba más pendiente del cuerpo de la joven, de tocar sus senos y besarle, que de la lección que debía proporcionarle. Incluso narra como llegaba a darle azotes, pero nunca con signo de ira, estos les ayudaban a aumentar la pasión entre ambos, tal pasión que nunca se apagó. Abelardo la pensaba día y noche provocando así una distracción en sus clases.

Al tiempo de más encuentros carnales la joven queda en cinta. Es decir, en embarazo, esto pone en evidencia sus practicas sexuales. El tener relaciones sexuales sin estar en matrimonio era una deshonra para la joven, teniendo presente que la lujuria era uno de los pecados más graves para la iglesia. El tío de Eloísa se enojó demasiado, esto llevó a que Eloísa y Abelardo huyeran. Tratando de remediar todo se casan, pero Eloísa no estaba de acuerdo ya que no había una coherencia para la sociedad, pues existía una contradicción entre lo espiritual y la carne.
Abelardo dedicando su vida a la teología y a la filosofía se veía como un desacierto para su carrera.
Pasado el tiempo Abelardo siente la real venganza cuando el tío ordena su castración. Este hecho es considerado como un ataque a la virilidad de los hombres, y si se piensa al honor de un hombre. Por lo que Abelardo sintió más vergüenza que dolor por tal castigo.

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