Apologetica

Apologética

Introducción:

“…santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;"

(1Pedro 3.15)

1. Apología

La palabra apología es también comúnmente traducida al español como “defensa”. En El NT se usa ocho veces; Hech 22:1; Hech 25:16; 1 Cor. 9:3; 2 Cor. 7:11; Fil 1:7; Fil 1:16; 2 Tim 4:16, 1 Pedro 3:15. En este último Pedro emplea el término de forma que denota la clase de defensa que uno haría en un proceso legal si alguien le pregunta ¿Por qué eres cristiano?

En ocasiones se cree de forma equivocada que la Apología Cristiana consiste en defender a Dios o sus razones. En absoluto. Dios no precisa de nuestra defensa. Con la apología trataremos de presentar de forma lógica la razón de nuestra fe. Porque creemos lo que creemos.

Beattie F.R. conculuyó en su reflexión sobre el cristianismo: “El cristianismo o lo es TODO para la humanidad o no es NADA, por ello, el aceptar las verdades sin razonarlas no es suficiente para una fe estable e inteligente” (paráfrasis).

2. El cristianismo es una fe y una predicación que se basa en hechos.

El cristianismo apela a la historia más que a la filosofía.

“Puesto que ya muchos han tratado de poner en orden la historia de las cosas que entre nosotros han sido ciertísimas, tal como nos lo enseñaron los que desde el principio lo vieron con sus ojos, y fueron ministros de la palabra, me ha parecido también a mí, después de haber investigado con diligencia todas las cosas desde su origen, escribírtelas por orden, oh excelentísimo Teófilo, para que conozcas bien la verdad de las cosas en las cuales has sido instruido. " (Luc. 1.1-4)

Lucas manifestó su deseo de presentar los hechos de forma ordenada. Y es que el cristianismo más allá de las enseñanzas de su fundador, se basa en los HECHOS que rodearon su vida y se desarrollaron a partir de su ministerio.

Presentaremos los hechos que resultan históricamente indisputables y veremos si la interpretación que le da la biblia resulta lógica.

Pablo dijo en 1 Cor 15:17 “si Cristo no resucitó vana (inútil) es nuestra fe…” de modo que todo el cristianismo pende de este hecho, del mismo modo la fiabilidad de las escrituras depende de la veracidad de los hechos en ellas relatados.

.Al usar la apologética debemos tener cuidado de algo: Dios es el que salva, no la apologética. Por otro lado Dios frecuentemente usa la apologética, o las evidencias, para ayudar a quitar obstáculos que levanta mucha gente en cuanto a la fe y mostrar que la fe en Cristo es razonable.

La conversión como una experiencia personal con el Espíritu Santo redunda en prueba definitiva de que el evangelio de Cristo es certero.

"Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón." (Hebreos 4.12, RVR60)

Necesitamos un balance entre ambas ramificaciones, presentar el evangelio de forma sencilla y directa pero también estar “preparados para responder a todo el que pida razón de la esperanza que hay en nosotros”, y el Espíritu Santo será el que convencerá.

ACLAREMOS ALGUNOS MALENTENDIDOS TÍPICOS

1. Malentendido 1: “La fe ciega”

Una acusación frecuente contra el creyente es esta: ¡”Ustedes los creyentes son dignos de lástima! Todo lo que tienen es una ‘fe ciega’ ”! Esto deja en claro lo que algunas personas piensan; “para convertirse en cristiano uno tiene que cometer un ‘suicidio intelectual’”. Nuestro corazón y nuestra cabeza fueron creados para trabajar en armonía. Cristo nos mandó amar “al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente” Mat. 22:37

El apóstol Pablo dijo: “Yo sé a quién he creído” 2 Tim. 1:12.

Si Cristo resucitó el va a permitir que en toda época seamos capaces de reunir suficiente evidencia para llegar a la conclusión de que Cristo es el Hijo de Dios, enviado para redimir a la humanidad, resucitado de los muertos y levantado al cielo.

¡Cuidado!, no se trata de probar más allá de toda sombra de duda, sino se trata de investigar y poner los pros y los contras en balance y ver hacia donde el peso de la evidencia inclina esta balanza, ver la conclusión lógica a la que llegamos.

A menudo el cristiano es acusado de dar un “salto en la oscuridad” Para mí el cristianismo no fue un “salto ciego a la oscuridad” sino más bien “un paso hacia la luz”.

Para poder tomar una decisión consciente y objetiva precisamos mantener la disposición a usar nuestro intelecto de forma plena. “conoceréis (no ignorareis) la verdad y la verdad os hará libres. Juan 8:32.

2. Malentendido 2: Lo importante es ser sincero.

Este pensamiento abunda especialmente en las aulas de filosofía. Que la importancia de lo que uno cree radica en la fe sincera de la persona. Pero esto es contrario al concepto cristiano de la fe “salvadora”, que es una fe que establece una relación de alguien con Jesucristo. La fe cristiana es objetiva, por ello debe tener un objeto, este es Jesucristo. La importancia de nuestra fe radica no en la calidad o intensidad de nuestra fe, sino en el objeto de nuestra fe.

Puede haber budistas o musulmanes más devotos que un cristiano, pero por sincera que sea su fe a diferencia del cristiano no son salvos.

No aceptaremos el cliché que dice: “No importa lo que tu creas en cuanto lo creas suficiente”. Uno puede ser sincero pero estar “sinceramente equivocado”. Pablo no descansaba en la calidad de su fe, sino en el objeto de ella. “Yo sé a quién he creido”2 Tim. 1:12.

Debemos evitar la actitud que dice: “¡No me confunda con los hechos, la decisión está tomada!”. La fe cristiana se basa en hechos. Pablo dijo:

"Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe;.. …aún estáis en vuestros pecados." (1 Corintios 15:4,17, RVR60)

Nota: La Biblia enseña que la persona que busca a Dios sinceramente le encontrará, pero un corazón sincero que busca la verdad también tendrá que pasar por el arrepentimiento.

Años atrás, en el boom del superhéroe Superman, muchos niños creyeron sinceramente que podían volar. Desgraciadamente muchos de ellos fallecieron a pesar de su fe sencilla y profunda en su capacidad de volar. Del mismo modo, si no existe el arrepentimiento y experiencia con Dios, podremos ser sinceros y estar sinceramente equivocados. La biblia enseña que nuestro misericordioso Dios no dejará de lado a nadie que le busque de corazón. La predicación del evangelio es ser un “vocero” junto con el Espíritu Santo invitando a las personas a disponer su corazón para Dios.

3. Malentendido 3: “La Biblia está llena de mitos”

La acusación de algunos críticos consiste en proponer como mitos hechos talos como el nacimiento virginal, el que Jesús anduviera sobre el agua, que convirtiera el agua en vino, etc.… Para ellos estos hechos nunca sucedieron y solo formaba parte del intento de los escritores de presentar a Jesús como una figura divina.

Existe una diferencia obvia entre la mitología (por ejemplo la mitología griega) y los eventos que la Biblia registrara en la vida de Cristo. En la mitología griega también existen relatos sobre resurrecciones y cosas semejantes, sin embargo en la Mitología Griega estos relatos no se aplicaban a individuos de carácter histórico, sino seres ficticios y mitológicos. Tampoco la “vida” de estos seres ficticios tuvo ningún efecto en la historia.

Los hechos que relata la biblia están unidos a al Histórico Jesús de Nazaret, al que sus discípulos conocieron personalmente.

3.1 Testigos oculares

Los escritores del NT escribieron como testigos oculares de los hechos que describían o registraban el testimonio de los primeros testigos de estos eventos.

"Porque no os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo fábulas artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad." (2 Pedro 1.16, RVR60)

"Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida (porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó); lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos..." (1 Juan 1.1-3, RVR60)

"Puesto que ya muchos han tratado de poner en orden la historia de las cosas que entre nosotros han sido ciertísimas, tal como nos lo enseñaron los que desde el principio lo vieron con sus ojos, y fueron ministros de la palabra, me ha parecido también a mí, después de haber investigado con diligencia todas las cosas desde su origen, escribírtelas por orden, oh excelentísimo Teófilo," (Lucas 1.1-3, RVR60)

"En el primer tratado, oh Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar, hasta el día en que fue recibido arriba, después de haber dado mandamientos por el Espíritu Santo a los apóstoles que había escogido; a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles

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