ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El Piloto


Enviado por   •  21 de Noviembre de 2013  •  1.371 Palabras (6 Páginas)  •  264 Visitas

Página 1 de 6

EL PRIMER “SOLO”

Escrito por Fabián Capecchi

Apenas despuntaba el sol y ya el fresco mañanero le huía al calor de Maracay. Un arriero que pasaba por el viejo camino de Las Delicias llevando sus burros, se detuvo un momento al escuchar un curioso sonido completamente ajeno a aquella imperturbable paz rural. Era un zumbido lejano, que parecía aumentar de volumen y bajar de nuevo, como un gran insecto volador. Detrás de la hilera de árboles del camino de Las Delicias, se veía a lo lejos un hormigueo de gente en gran actividad. Varias personas sacaban empujado del hangar uno de aquellos aeroplanos que había comprado hace poco el general en jefe Juan Vicente Gómez, quien ostentaba el poder real en el país. El avión parecía hecho de palitos y cuerdas. El campesino prefirió apurar el paso, en aquellos tiempos más valía no llamar la atención y caminar ligero.

Al otro lado de la arboleda, en el campo de aviación uno de los biplanos Caudron G.III, de doble larguero y frágil aspecto se disponía a volar. Sobre él iba un jinete con traje de piel, casco alto y anteojos, dispuesto a domar a la bestia. Su motor ronroneaba encabritado, y al aumentar las revoluciones la gente se apartó del avión y éste comenzó a carretear solo poco a poco hacia campo abierto.

¡Allez…Allez! - le gritó una de las personas también vestida de aviador.

A bordo, muy concentrado en la maniobra, el piloto, intentaba recordar todos los detalles y recomendaciones que le habían dado los instructores franceses. El nerviosismo del alumno piloto apenas se notaba, sin embargo una bandada de pájaros revoloteaba dentro de su estómago.

El sub-teniente Manuel Ríos. Foto: Colección Beatriz Ríos Herrera

El subteniente Manuel Ríos Hernández, había nacido en Altagracia de Orituco en 1898. Era hijo del general Antonio de los Ríos López, español nacido en Puerto Rico que vino a Venezuela cuando esta isla pasó a manos norteamericanas. Como era técnico en turbinas de vapor Pearson, su experiencia resultó muy valiosa en la reparación de una central eléctrica instalada cerca del río Orituco, cuyo caprichoso curso era convertido en energía y enviada hasta Caracas para ahuyentar con su luz a los viejos espantos de la capital. Sin embargo, al terminarse el trabajo en Altagracia se mudó a Guatire en donde se unió a la lucha contra un grupo de gente armada que habían incursionado por las haciendas y logró derrotarlos. En recompensa a sus servicios a la causa el presidente Juan Vicente Gómez le otorgó el grado de general de brigada del Ejército de Venezuela.

Mientras Ríos enfilaba su avión con dificultad entre las hierbas altas llamadas Escoba amarga y llegar al punto indicado para iniciar la carrera de despegue, recordaba el momento casi un año atrás en que por primera vez vio un aeroplano. Pasó rugiendo a baja altura sobre sus cabezas rumbo al hipódromo de Maracay donde aterrizó con la elegancia de una garza real. Su reacción fue correr hasta el sitio, al igual que todas las demás personas, todos querían ver el avión. A pesar de lo desgastado que lucía, era una máquina soberbia. Según le contaron, el piloto italiano que se apeó del aparato había combatido durante la guerra derribando a varios aviones enemigos. Ríos sintió la necesidad de tocar el avión, puso la mano sobre el fuselaje cerca del motor, percibió dentro el calor de la máquina y tuvo una curiosa sensación, fue como si todo lo que había logrado hasta ahora se hiciese minúsculo al lado de poder volar. De pronto quería ser aviador, subir a lo más alto, zambullirse entre las nubes y sentirse inalcanzable.

Días después estando de prácticas en el regimiento de artillería, escuchó el rumor de que abrirían una escuela de aviación Militar en Maracay y que iban requerir voluntarios. Casi no podía disimular su emoción, corrió a alistarse pero llegó tarde, anotados en la lista ya había muchos nombres delante de él, civiles y militares, y sabía que solo unos pocos serían seleccionados. Al año siguiente logró estar entre los primeros y formaría parte de un nuevo grupo que comenzaría a finales de enero.

Sin embargo pasó enero y febrero solo recibiendo clases teóricas, hasta que por fin a finales

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (8.1 Kb)  
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com