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El “descubrimiento” de América y la formación de la economía mundo en el XVI


Enviado por   •  30 de Junio de 2015  •  Tutoriales  •  8.036 Palabras (33 Páginas)  •  251 Visitas

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Abordar el tema de esta discusión sobre la cuestión colonial exige primero una aclaración de mi parte: es obvio que el uso del termino “periodo colonial”, o “época colonial” para hablar de todo el lapso que va desde 1492 á 1825, si bien es una convención generalmente aceptada por los historiadores de ambos lados del Atlántico, poco nos dice sobre los cambios y permanencias que la(s) sociedad(es) en cuestión ha(n) tenido en esos tres largos siglos. Es una convención, pero su grado de conceptualización como hito de demarcación y sobre todo, como forma de periodización, es igual a cero.

2El problema que quisiera tratar aquí es otro y a él me quiero referir. Es decir, ¿existe algo que podemos llamar “relación colonial”, sea que lo analicemos desde el punto de vista político, sea que lo estudiemos desde una mirada estrictamente económica? Este es, para mí, el punto más relevante y desde el cual se deberán leer las páginas que siguen. El autor lamenta dos cosas y desde ya se disculpa frente a los potenciales lectores: primero, la mayor parte de lo que sigue resulta de una obviedad absolutamente desarmante, pero es evidente, en el marco de esta discusión, que es indispensable recordar determinados hechos; segundo, la extensión es excesiva, pero nos pareció necesario tratar algunos aspectos con cierto detalle.

1. El “descubrimiento” de América y la formación de la economía mundo en el XVI

3Si bien es indudable que los europeos estaban animados por exigencias complejas y con­tradictorias en este primer viaje colombino, lo que impresiona en los relatos del propio Almirante durante sus primeros días en la islas caribeñas, es su monomanía aurífera: el tema del oro aparece una y otra vez en sus primeras cartas, confirmando así uno de los elementos centrales que se hallaban en el corazón de los intereses castellanos. Escribe Colón el sábado 13 de octubre (¡al día siguiente de haber avistado tierra americana!):

"Yo estava atento y trabajava de saber si havia oro y vide que algunos de ellos traian un pedazo colgado en un agujero que tienen en la nariz. Y por señas pude entender que... estaba por alli un Rey que tenia grandes vasos de ello..."

4Así, desde el inicio mismo de la aventura americana, los metales preciosos ocuparon un papel fundamental en flujo mercantil América / viejo mundo. Durante más de tres siglos y medio –es decir, incluso más allá de la ruptura del vínculo colonial-el metal precioso sería la mercancía por excelencia en las relaciones entre las nuevas colonias y Europa. Hasta fines de periodo colonial, alrededor del 75% del valor de lo exportado desde América consistió en plata y oro. Los castellanos llegan tarde a esta carrera por el oro y la plata. Ya desde 1457 el rey portugués acuña los primeros cruzados de oro, que mantendrían su encaje durante casi un siglo (los venecianos lo llamarían “el rey del oro”). A la muerte de Enrique el Navegante [1460], Portugal poseía un vasto "imperio" que incluía sus posesiones en las islas y la costa africana. Y ya desde mediados del siglo XV hay constancias de la introducción de esclavos negros en el Portugal. Fue este mismo tráfico, según Charles Boxer, el que ayudó a financiar el costo de los viajes en la costa africana. São Jorge da Mina, en la llamada -no casualmente-"Costa del Oro", será el ejemplo típico de esa factoría en donde se intercambiaban mercancías europeas por oro, esclavos, marfil y otros productos africanos.

5Esta avidez europea por el oro se explica en gran parte por el hecho de que, habiendo descendido los precios de las mercancías, sobre todo expresadas en oro, el metal amarillo se había valorizado en relación a esas mercancías. Pero, además, dado que la economía europea estaba transitando una nueva etapa de crecimiento, la exigencia de medios de pago era un también un sólido acicate para la búsqueda de nuevas fuentes de aprovisionamiento en metálico.

6En los inicios de la irrupción castellana en América los metales preciosos tenían dos fuentes fundamentales: los placeres, es decir, los lavaderos de oro de origen aluvional y los tesoros (objetos rituales y adornos) acumulados durante siglos por las sociedades indígenas. Las primeras grandes minas de extracción solo aparecen varias décadas más tarde del último viaje colombino [entre 1538 y 1546 se ponen en actividad Porco y Potosí en el Perú, al igual que Taxco, Pachuca y Zacatecas en México] y será con ellas que la plata dominaría ampliamente sobre el oro desde los años cuarenta en adelante. De todos modos, algunas regiones como la Nueva Granada, seguirá albergando importantes centros de producción aurífera de carácter aluvional que la convertirían en la primera área de producción de oro durante el siglo XVI.

7En los primeros tiempos, el oro fluía desde el Caribe (unos 30.000 kilos habrían llegado a la Península desde 1492 hasta 1520, cuando la casi total desaparición de los indígenas agotó esta primera fuente aurífera). Pero, si en la década de 1521-1530 llegan casi 5.000 kilos de oro a Sevilla (es interesante notar que el flujo portugués de oro sobrepasaba todavía en los años 1510­1520 los 700 kilos anuales) y sólo se cuentan 148 kilos de plata, en el largo plazo, la plata dominará en forma total. Veamos algunas pocas cifras: de 1500 à 1650, el tráfico legal implicó el envío desde América de 181 toneladas de oro –o sea, un poco más de 1.200 kilos anuales-en cambio, se embarcó desde el Nuevo Mundo a España la cantidad, realmente fabulosa, de 16.000 toneladas de plata, o sea, casi 110.000 kilos de plata cada año (promedio para todo el periodo que supera a las cantidades anuales máximas producidas en las minas de Europa central en sus mejores momentos, es decir, los años 1526-1535). Y estamos hablando aquí sólo del tráfico legalmente registrado (tampoco hemos tomado en cuenta en este cálculo el flujo directo hacia Oriente, vía Acapulco). Por supuesto, dado que llega mucho más plata que oro, ello da como resultado inevitable la lenta desvalorización de la primera respecto al segundo, proceso que se arrastrará durante todo el periodo colonial.

8El papel que tenía hacia fines del siglo XVI la exportación de metales preciosos americanos en el marco de la economía mundo en formación, queda en evidencia si observamos el cuadro siguiente, en el cual presentamos las principales importaciones europeas para los años 1591-1600 según Peter Kriedte (hemos redondeado los valores para facilitar la lectura):

Importaciones europeas (promedios anuales): 1591-1600

Región de origen

Mercancía

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