Geraldine Shwartz, Los amnésicos. Historia de una familia europea

Los amnésicos

De Geraldine Schwartz

Los Amnésicos, ganador de varios premios, incluyendo El Premio al Libro Europeo 2018, busca adentrarse al fondo de una memoria de manera sincera, donde Schwartz se pregunta sobre el papel de sus abuelos durante y después de la Segunda Guerra Mundial bajo el régimen de la Alemania nazi, un papel que representaba la mayoría de la población alemana, aquella que no estaba ni a favor ni en contra, los Mitläufer. El escrito se centra también en sus abuelos, franceses y alemanes, esto le llevó a ampliar la manera de ver lo sucedido y darse cuenta que la realidad se percibía de distintas maneras, mientras que en Alemania se escribieron memorias durante el periodo de desnazificación (proceso que se llevó acabo junto con algunas potencias como Francia, La Unión Soviética y Europa), en otros lugares como en Italia y Austria, se negó cualquier tipo de genocidio.

La autora cuenta parte de la historia Europea y explica la importancia de “Tejer dos hilos juntos, dar amplitud al relato familiar sometiéndolo al juicio de la Historia, a la sabiduría de los historiadores, esos detectores de mentiras y de mitos. [...] Quiero comprender lo que era para saber lo que es, devolver a Europa sus raíces, que los amnésicos intentan arrancarle”^[1]

Es indispensable destacar el modo en el que Hitler ocultaba los objetivos a la población alemana, esto para evitar que quienes se opusieran a ellas hicieran algo al respecto, buscaba saber cual era su nivel de tolerancia en su pueblo y  prohibía a los trabajadores contar que sucedía en los campos de concentración, esto para que no se supiera y sus objetivos se mantuvieran aún en secreto.

Su abuelo Karl perteneció al NSDAP (Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán) no por convencimiento, sino por comodidad, este obtuvo una pequeña empresa de productos petrolíferos de manos de judíos, que bajo el régimen nazista, tuvieron que vender sus terrenos y darse al exilio. Al finalizar la guerra, en la zona de la ocupación Americana y con la aplicación de la ley de restitución, su abuelo fue castigado por ser parte de los Mitläufer y se le quitó el poder de su empresa, la autora critica el modo de actuar de su abuelo, quien culpó a los judíos de haber llegado a esa situación. Su abuela apoyaba a Adolf Hitler, pero no era antisemita, acabó suicidándose. Sus abuelos maternos, franceses, no hablaron mucho de su pasado, pero también formaban parte de la población “indiferente”.

Hasta hace pocas décadas, el conflicto mundial había causado que el genocidio judío resultara como tema tabú para algunos nazis cercanos a Hitler, negaban tener conocimiento de lo ocurrido en las cámaras de concentración. Ni siquiera los mismos judíos sabían bien que les pasaría cuando eran detenidos y llevados a los campos de concentración. Después serían despreciados por judíos de diferentes países por quedarse en Alemania.

El texto de Geraldine muestra un aporte a la información histórica, reconoce la mención de diferentes autores relacionados con el tema y esta se complementa con las aportaciones personales de sus familiares implicados, sobre todo.

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