Historia Jerusalen

JERUSALÉN, ISRAEL (03/OCT/2011).- Las fuerzas de seguridad israelíes aumentarán sus patrullas y su vigilancia en torno a los templos y otros lugares sagrados musulmanes después de que hoy fuese incendiada una mezquita en la región de Galilea (norte del país).

El responsable de la División de Operaciones de la Policía israelí, Nissim Mor, ha dado instrucciones de incrementar las patrullas de vigilancia en esos lugares mientras que el jefe de Policía, Yohanan Danino, ha ordenado "tolerancia cero" contra los que provoquen disturbios y violen la ley, según la edición digital del diario Yediot Aharonoth.

Un grupo de desconocidos entró la pasada madrugada en la mezquita del pueblo de Tuba Zangaria, en Galilea, y prendió fuego a las alfombras, libros, adornos y las paredes interiores.

Sobre los muros de la mezquita aparecieron pintadas con lemas como "venganza" y "política de precio", que hacen referencia a la estrategia de algunos grupos de colonos de atacar propiedades o símbolos palestinos como manera de resarcirse por incidentes contra judíos o desmantelamientos forzosos de asentamientos por parte del Ejército israelí.

El ministro de Seguridad Interna, Yitzhak Aharonovitch, visitó hoy la mezquita incendiada, al igual que habían hecho horas antes el presidente israelí, Simon Peres, y los rabinos jefes de Israel, Shlomo Amar y Yona Metzger, respectivamente.

"Estoy consternado y avergonzado con lo que ha pasado aquí. Esto no va sólo contra la ley, sino contra la religión judía y la moral. No lo aceptaremos, es nuestro deber proteger estos lugares", dijo Peres en el lugar del suceso.

También el primer ministro, Benjamin Netanyahu, condenó el ataque por atentar contra "los valores del Estado de Israel" y afirmó que la libertad de religión y de creencias "son valores supremos".

Por su parte, el ministro de Seguridad Interna calificó la acción de "crimen atroz" y aseguró que se ha reforzado el equipo que investiga los hechos y que sus autores "serán capturados".

"Están destruyendo la fábrica de nuestras vidas. Somos todos hermanos en Oriente Medio y este incidente no arruinará nuestra relación", indicó Aharonovitch.

Cerca de 300 palestinos protestaron hoy por el ataque a la mezquita lo que desembocó en enfrentamientos violentos con la Policía.

"Hemos elevado el nivel de alerta en el norte, para evitar que haya problemas en la zona. Esta mañana se registraron disturbios entre el pueblo (árabe) de Tuba y la localidad de Rosh Pina, en las que los manifestantes tiraron piedras a agentes de Policía y quemaron neumáticos", declaró a Efe el portavoz de la Policía israelí, Miki Rosenfeld.

Las fuerzas de seguridad utilizaron

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