La Montonera Fradkin

La historia de una montonera de Raúl Fradkin trata sobre un episodio en particular: la invasión armada al pueblo de Navarro en 1826, por parte de la montonera de Cipriano Benítez.

El análisis comienza con el estudio de lo sucedido en la madrugada de 13 de diciembre de 1826, cuando un grupo armado se declara “montonero” y “federal” , e invade el pueblo de Navarro, y desde allí intentan hacer lo mismo en la Villa de Lujan, pero se encuentra con la resistencia de los vecinos. El resultado del enfrentamiento es la derrota de los montoneros. Benítez, días más tarde, es detenido y fusilado.

La historia de esa montonera en particular, muestra como un grupo de hombres, movilizados por las tensiones económicas y sociales del momento, experimentaron otro tipo de poder y de política con los elementos que tenían a su alcance.

Para realizar el análisis, el autor recurre a la búsqueda de variadas fuentes: sumarios policiales, expedientes judiciales, informes de autoridades locales, peticiones de vecinos, e información periodística. De estas fuentes, Fradkin intenta rastrear el motivo que lleva a los caudillos a la adhesión a este tipo de movimientos.

Para comenzar el estudio, Fradkin nos muestra la percepción del poder sobre el conflicto, luego da lugar a las motivaciones de los montoneros para sumarse a tal campaña, la del asalto al pueblo de Navarro y el intento fallido de hacer lo mismo en Lujan. Si bien, a través de las fuentes, se muestra que en el contexto no había identidades políticas, el suceso trabajado por el autor, muestra que los protagonistas del mismo, intentan deponer las autoridades locales que ya ejercían una creciente coacción a través de la leva forzosa y el aumento de la presión fiscal en las tierras comunitarias, producto de las necesidades del Estado en un contexto de guerra civiles, guerra con el Brasil y lucha en la frontera interna.

Según Benítez, la acción de la montonera iba a favorecer a los “hijos de país”, aquí la montonera se presenta como una continuación de la guerra contra los “extranjeros” que se mantenían en el poder, aun después de la guerra revolucionaria. A pesar de todo, las estrategias para lograr la adhesión no resultaron, solo con desertores y paisanos, por lo que el movimiento termino siendo subalterno.

Por último, el libro de Fradkin plantea nuevos problemas en torno a la estructuración del poder en la campaña, en la cual el liderazgo de Rosas no estaba aun consolidado. El movimiento de Benítez, en contra de la “leva forzosa” y a favor de una “política pacífica” con las comunidades indígenas, permite al autor mostrar la posterior adhesión de los paisanos a Rosas. Benítez muestra un “rosismo antes del rosismo”.

Fradkin, va a sostener, que caudillismo y montoneras, han sido temas muy conocidos pero muy poco estudiados. Ninguna de las corrientes historiográficas llevó adelante un estudio

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