“La influencia de Confucio en la Cultura Occidental”

“La influencia de Confucio en la Cultura Occidental”

Confucio fue un destacado pensador chino, cuyo nombre literalmente viene a ser: “Maestro Kong”, proveniente de la actual provincia de Shandong, ubicado en la República Popular China, creador de una doctrina llamada: el confucianismo, que básicamente consistió en la tranquilidad de su Estado, en el respeto mutuo de las personas y en reforzar la importancia de la familia tradicional en la sociedad China. El motivo más probable del porqué Confucio tuvo una doctrina tan cabal y acertada, en la que primaba el respeto y armonía es debido a que el sabio pensador vivió durante la dinastía Zhou, y ésta estuvo envuelta en un ambiente de caos y desorden.

El confucianismo es la doctrina principal en China, que surge en el transcurso de la dinastía Han. La relación entre la doctrina de Confucio, y la cultura Occidental, es la siguiente: La vida cotidiana en Occidente, gira entorno a la razón, a las jerarquías establecidas, a la dominación tanto económica, como política y religiosa. Tal cual lo que proponía Confucio, al decir que el súbdito respete a su gobernador, al que una mujer respete a su marido, al que un hijo respete a su padre y todos durante su gobierno vivan en armonía.

La jerarquía en el confucianismo no es solo social, sino también moral. En la China antigua una familia no solo se veía como un núcleo reducido, se veía en cambio como un pequeño reino con las ocupaciones muy bien organizadas, es decir, cada integrante sabía su función en el hogar. La cultura occidental separa muy bien la religión y el Estado, su religión es monoteísta y respecto a su forma de estado es capitalista. Confucio influyó en su cultura, al predicar su doctrina y hacerla ver como un gobierno correcto y armonioso, en el que cada uno saben su posición y respetan la de su prójimo.

A modo de conclusión; Confucio fue un gran filósofo, que más allá de predicar su doctrina, lo que él hizo fue transmitir sus saberes, tal y como él lo dijo: “Yo no soy un creador sino un transmisor”, y es que Confucio se enriqueció de sabiduría de sus antepasados y así encontró la forma ideal de llevar un gobierno con paz y respeto mutuo. Doctrina que sus respectivos 3,000 discípulos lograron difundir a las demás sociedades, como fue la cultura occidental China.

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