La novela de caballerías es un género literario en prosa

Origen.

La  novela de caballerías es un género literario en prosa, de gran éxito y popularidad en España, y en menor grado en Portugal, Francia y la península Itálica en el siglo xvi. Se escriben desde fines del siglo xv hasta 1602 y empiezan a perder su popularidad después de 1550.

En la Edad Media, la situación de desigualdad social, ya anteriormente mencionada, dio lugar a una vida caballeresca cuyo origen fue fundamentalmente militar, donde la relación señor-vasallo fue uno de los pilares centrales y los caballeros asumieron una parte activa e influyente.  Dicha vida caballeresca llevó a distinguir tres tipos de caballeros: los de órdenes militares, los caballeros cubiertos y los caballeros andantes. Los primeros fueron aquellos que tomaban voluntariamente la caballería como una profesión. El título de caballero cubierto estaba reservado para los altos grados de la nobleza y era hereditario. Y, finalmente, los caballeros andantes fueron aquellos aventureros para quienes el honor y la lealtad constituían valores personales que los llevaban a la realización de proezas. Fueron estos quienes dieron lugar a lo que constituyó, más tarde, la novela de caballería.

Características.

Entre los aspectos particulares de este tipo de novela, podemos distinguir, que se enriqueció de muchas otras tradiciones: los mitos clásicos grecolatinos, leyendas europeas y el amor cortés. Todo ello, más la caballería como actividad militar y cortesana, dio lugar a un héroe caballeresco que, parte de un origen guerrero que se va poco a poco idealizando y nacionalizando. El más claro ejemplo de este proceso es el mismo rey Arturo de la tradición británica.

A partir del Amadis (1508) la fecunda imaginación de los autores españoles crea una nueva mitología de héroes quienes ayudados por unos nuevos dioses, los magos y los encantadores, se podrán enfrentar y salir victoriosos de ejércitos enteros y de monstruos dragones. Su vida es un continuo cabalgar, sus encuentros siempre son extraordinarios: un gigante, un enano, una hermosa doncella en apuros; el descanso en el castillo de oro y cristal estará obstaculizado siempre por lagos encantados o serpientes maléficas. Pero el caballero ha de seguir siempre adelante, luchando sin descanso para mantener la justicia, propagar la fe, conquistar reinos y enamorar alguna dama. En esta fecundidad de episodios (en los libros de caballería siempre están sucediendo cosas), los hechos prevalecen sobre los sentimientos  y los pensamientos pero a la vez son vehículo a través del cual estos se transparentan.

Los héroes principales se destacan de los demás personajes de la novela por acumulación de rasgos extraordinarios. Nacidos en secreto o en circunstancias misteriosas, toda su vida estará marcada por lo maravilloso y excepcional; nada de lo común de lo cotidiano , entrará en la vida de estos jóvenes caballeros.

Desde el Amadis hasta el Quijote (1605), todos los españoles leen los libros de caballerías: reyes, venteros , soldados y santos, escritores e iletrados. Bautizan a sus hijos con los nombres de Amadis, Galaor, Tristan, Galvany o Lancelot, creen tan auténtico al rey Artús como al Cid, y los más arrojados se hacen caballeros andantes << de verdad>>

Las aventuras que emprenderán se harán famosas; los <> pusieron en practica lo que leyeron tantas veces y tantas veces y <>  

Novela de Caballería

1) Ciclo Clásico: Un primer grupo de estas novelas en verso se refiere a héroes de la antigüedad: es el ciclo clásico. De una obra del pseudo Calistenés sobre la vida de Alejandro Magno surge un poema en el que la figura del conquistador macedonio aparece en extremo fantaseado y todo la obra está repleta de graciosos anacronismos y de prodigios estupendos. Los autores del Roman de Alejandro utilizan un tipo de verso que por eso será conocido como alejandrino.

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