Padre Gabriel Garcia Herrero

Ensayo sobre “UNA VIDA Y UNA OBRA”

PADRE RAFAEL GARCIA HERREROS.

SILA BEATRIZ PEREZ CARCAMO.

UNIVERSIDAD MINUTO DE DIOS UNIMINUTO

Una vida y una obra del Padre Rafael García Herreros nos muestran como el ser humano en medio de un mundo lleno de matices puede re encontrar la fe y la esperanza en cosas tan sencillas pero tan profundas como es el servicio a los demás.

“Vivir con los pies en la tierra y con el corazón en el cielo” no es fácil para muchos pero tampoco imposible, lo fundamental para aplicar esta frase en nuestras vidas como proyecto de vida es dentro de la familia esta comunión la viviremos siendo solidarios con nosotros mismos, y con nuestros hermanos, ser solidario y de un corazón humilde fue lo que llevo al padre, Rafael a construir un mundo diferente para tanta gente con sed social, con sus muchas fundaciones nos deja un legado de servicio por la comunidad debemos querer el país en el que vivimos, la ciudad o pueblo que nos vio nacer, son unos de sus tantos deseos.

A diario nos encontramos con personas con muertes espirituales, hombres que siempre han tenido sed de riquezas materiales, el hombre actual debe centrarse en el servicio a los demás sin olvidarse de la presencia de Dios porque es allí donde nos hacemos humanos, donde sentimos la verdadera presencia de ese ser infinito que nos mueve por dentro ,esa fuerza que día a día nos alienta a ser mejores personas aunque nos equivoquemos, cuando en nuestro interior vemos la vida con positivismo, nuestra vida exterior se vive de una manera maravillosa.

De acuerdo con lo citado por el Padre debemos ser personas que no quebrantemos la paz, la alegría, debemos luchar incansablemente por el progreso de nuestros hogares y por ende de nuestro país para así alcanzar la meta final que es el desarme de todo un pueblo, de toda una nación, y no olvidar como dice el en su texto al Campesino, le debemos una deuda que nos ha pesado por muchos años y es el abandono en el que han estado y siguen estando, los cuales por culpa de un país sin conciencia como el nuestro, que los ha llevado a una vida indigna en donde por el desplazamiento concebido por la desigualdad social y la guerra sin sentido los hemos hecho sentir extraños en su propia nación.

Cabe resaltar en este ensayo que uno de los puntos centrales de la doctrina social es que el hombre es un ser esencialmente social, y su vida está ligada a cumplir un fin en favor de los demás: es decir que debe servir a la comunidad con todo aquello de que disponga.

Si tiene talento, con la inteligencia

Si tiene riqueza, con la riqueza

Si tiene alegría si tiene dolor, con ellos prestar servicios invaluables.

El

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