CARTAS A UN ESTUDIANTE DE DERECHO Miguel Carbonell

En este libro Miguel Carbonell al principio nos narra, sobre como deseaba estudiar en las aulas de la UNIVERCIDAD AUTONOMA DE MEXICO, aunque dice que no sabía qué carrera iba a escoger aun, él se sentía muy atraído hacia esta gran universidad como dice el “un flechazo de esos que nos ocurren pocas veces en la vida”.

Nunca imagino que ese deseo cristalizaras en una de las decisiones más importantes   de su vida… estudiar derecho en la UNAM.

Carbonell ha pasado gran parte vinculado con la facultad de derecho de la Universidad  Nacional y con los estudios jurídicos en general; cuenta de esa gran experiencia extraordinaria y del tránsito de su formación académica, de ver a los alumnos corriendo por los pasillos de las universidades a las que ha servido yendo presurosos y emocionados a sus clases de derecho, lo cual  es uno de sus mayores tesoros.

Miguel comenta que en las aulas se genera conocimiento, se ponen a prueba las teorías y el debate abierto, se construyen seres humanos  siempre en busca de aquellos valores que los hacen mejores. Termina diciendo sobre la importancia de los años universitarios los cuales ameritan que sean aprovechados al máximo, desde un punto de vista académico y personal.

Este libro se divide en varias cartas las cuales van aconsejando, dando la bienvenida, dando pautas para llegar a ser un mejor estudiante y llegar a lograr no solo ser un buen estudiante sino un mejor abogado una vez graduado y ejerciendo a esta carrera de ciencias sociales, la cual es en  mi opinión no solo de leyes ni de justicia, sino de personas que llevan a cabo una lucha por el bien de una comunidad, de una persona, de una familia inclusive de una nación, esta carrera es de personas que saben de lo bueno y lo malo, personas cultas, inteligentes que buscan el bien tanto personal como el de las demás personas.

Bienvenida….

En esta primera carta Miguel Carbonell te habla de la decisión que ya habías tomado para estudiar en las ciencias sociales específicamente derecho, en el cual hace unos meses salías de la preparatoria y ahora te enfrentas a una nueva etapa de tu vida… la etapa de la universidad la cual en mi particular punto de vista es una decisión muy importante, ya que al escoger tu una carrera es una fase muy importante porque de aquí depende tu futuro; un futuro en el cual vivirás de esta maravillosa carrea, en la cual como menciona el doctor Carbonell no solamente aprobar las materias sino hacerlo de una forma destacada obteniendo las mejores calificaciones, también tenemos que ir haciéndonos de hábitos, si varios hábitos los cuales forjaran primero que otra cosa tu desempeño estudiantil ya que entes de correr ay que aprender a caminar, el primer habito es familiarizarse con los hábitos y rutinas  de tu nueva vida universitaria; comprender adecuadamente el lenguaje que utilizan los profesores y que muy pronto los estudiantes deben de comprender y manejar de igual forma.

En este libro Miguel menciona los hábitos formales y hábitos sustanciales, los hábitos sustanciales son el cómo se comprende nuestra carrera universitaria el cual es el estudio y el aprendizaje, los hábitos formales son aquellos que permiten aprovechar de una mejor manera los años dentro de la universidad, menciona que debemos adecuarnos a los horarios de clase, organizar nuestras actividades, el cumplimiento de las obligaciones que conlleva el estudiar, la asistencia a clases, aquí destaca Carbonell que debemos poner entusiasmo y más ahínco en las tareas, los exámenes y algunas reuniones de compañeros siempre que trate de temas relacionados con las clases. El estudiar no es algo que se adquiere por la simple respiración, debe existir esfuerzo, dedicación, compromiso y disciplina…. Esto lo comenta el doctor ya que en acuerdo con esto que menciona tiene bastante razón porque no basta con ir a las clases escuchar tomar nota, hacer las tareas y no entender de que se trató el tema, si no que ay que ver más allá de lo que nos enseñan en las aulas, consultar autores que hablen de los distintos temas ya que si al profesor no le entendimos del todo, al leer a estos autores podemos reafirmar de una mejor forma este conocimiento, y ampliar más las opciones de los distintos temas del derecho.

Nos menciona le autor que debemos estudiar en una habitación donde no existan distractores como televisores prendidos, o ciertos dispositivos electrónicos que son una fuente de distracción bastante grande, menciona que existen personas que estudian y se concentran mejor de forma silenciosa y aislada o con algo de música; nos da una pauta de que nuestros familiares y amigos deben respetar tu hora de estudio ya que es sagrada como lo menciona Carbonell y destacando que debemos dar prioridad al estudio evitando los distractores y poniendo metas y hábitos para lograr el avance y llegar al final en esta carrera.

Desde la preparatoria comienzan ciertos hábitos de estudio como llegar al salón y copiar la tarea o simplemente no presentarla, si bien en la prepa no se preocupan los alumnos por estas situaciones en la carrera será más difícil lograr llevar acabo las actividades extracurriculares ya que los profesores no están de niñeros tras de ti esperando que cumplas con tareas y trabajos.

Como Carbonell menciona en su carta II… en la universidad nadie te va  a perseguir para que asistas a clases, lleves en orden tus cuadernos de apuntes y te prepares para los exámenes.

Entonces aquí es cuando uno como estudiante debe centrase y prestar atención a sus clases y a su obligaciones como estudiantes.

Miguel dice que los libros son buenas fuentes de información y un amplio universo al igual existen las revistas jurídicas las cuales se encuentran muchas veces en internet, menciona que una buena fuente de información es el instituto de investigaciones jurídicas de la UNAM el cual publica varias de las más prestigiosas revistas jurídicas de américa latina, la universidad de Harvard y la universidad de Yale al igual en sus páginas de internet tienen bastantes artículos los cuales sirven para enriquecer el conocimiento. Nos da consejos como asistir a clases, tomar apuntes de calidad y no de cantidad como varios profesores “maletas” que solo les gusta dictar, esto en mi punto de vista, además nos menciona pedirles a nuestros profesores bibliografías para poder complementar los temas y consultar revistas.

Lenguaje jurídico… esta parte es muy cierta, en muchas ocasiones cuando entramos a la carrera, no entendemos algunas o ninguna de las palabras de las que dicen los profesores que nos imparten derecho, pero con el tiempo vamos aprendiendo este lenguaje jurídico, que para muchos y como el mimos Carbonell menciona es un poco rebuscado…. Los abogados no solamente suelen ser rebuscado en sus expresiones, sino que además son prolijos. Lo que pueden decir en pocas páginas, a veces lo prolongan hasta construir enormes legajos llenos de tecnicismos y abstracciones incomprensibles… esto lo menciona Carbonell en su carta número III. En esta parte coincido con él ya que es muy acertado, que de textos o contestaciones simples lleguen a dar extensas respuestas o elaborar legajos bastante grandes, esto a que se deberá, pues a que un abogado siempre comunica con eficacia lo que piensa. En muchas ocasiones abogados cometen grandes errores al rebuscar palabra que llegan al grado de caer en la incoherencia a la hora de hacer escritos o en el mismo dialogar…. Un buen abogado es el que va directo punto medular sin darle vueltas de forma innecesaria.

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