ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Cantar Del Mio Cid


Enviado por   •  2 de Septiembre de 2012  •  4.440 Palabras (18 Páginas)  •  428 Visitas

Página 1 de 18

CANTAR PRIMERO: EL DESTIERRO DEL CID.

El Rey de Granada Almudafar, quería atacar al Rey de Sevilla, Almutamiz. Almudafar, tenía amistades muy poderosas, el conde García Ordoñez, y Fortún Sánchez - yerno del Rey don García de Navarra - y Lope Sánchez, todos estos, querían calentar al Rey de Sevilla, el Cid, no le gusto mucho lo que iban a hacer así que, les mando unas cartas suplicándoles que no atacaran al Rey de Sevilla. El Rey de granada y su tropas pasaron de las suplicas del Cid, y atacaron al Rey de Sevilla, Almutamiz, el Cid reunió fuerzas y se enfrento al Rey de Granada, derrotándole. Todo lo que consiguió en esa batalla, se lo llevó al Rey de Sevilla

La gente se sentía envidiosa, y empezó a hablar mal del Cid, el Rey como tenia algo de rencor, por algo que le había hecho en el pasado el Cid, no tardo mucho en escucharlos. El Cid estaba muy contento, pero de repente, llegó una carta diciendo que sé fuera del reino en un plazo de unos nueve días, reúne a sus vasallos, y estos se destierran con él, se van de vivar, pero en Burgos nadie se atreve a hospedarle, ya que el Rey ha dicho que el que lo hospede, ¡que se prepare! Así es que el Cid y sus vasallos, siguieron su camino, llegó Martín Antolinez, para proveer de bienes al Cid, como el Cid estaba empobrecido se le ocurrió hacer unas arcas, y llenarlas de arena, y vendérselas a Raquel y Vidas, se trató y se las vendió por unos seiscientos marcos.

Cantar primero, el destierro de Mio CID.

El Rey de Granada Almudafar, quería atacar al Rey de Sevilla, Almutamiz, (estos dos se odiaban a muerte), Almudafar, tenia `amistades', o contactos muy poderosos, conde García Ordoñez, y Fortún Sánchez -- yerno del Rey don García de Navarra - y Lope Sánchez... todos estos, querían calentar al Rey de Sevilla, el Cid, no le gusto mucho lo que iban a hacer así que, les mando unas cartas suplicándoles que no atacaran al Rey de Sevilla. El Rey de granada y su `tropa' pasaron de las suplicas del Cid, y atacaron al Rey de Sevilla, Almutamiz, el Cid reunió fuerzas y se enfrento al Rey de Granada, derrotándole. Todo lo que consiguió en esa batalla, se lo llevó al Rey de Sevilla. Este le dio el sobrenombre de CID CAMPEADOR, el Cid lo agradeció, y su Rey Alfonso VI, se sentía orgulloso de su vasallo. La gente se sentía envidiosa, y empezó a hablar mal del Cid, el Rey como tenia algo de rencor, por algo que le había hecho en el pasado el Cid, no tardo mucho en escucharlos. El Cid estaba muy contento, pero de repente, llegó una carta diciendo que sé fuera del reino en un plazo de unos nueve días, reúne a sus vasallos, y estos se destierran con él, se van de vivar, pero en Burgos nadie se atreve a hospedarle, ya que el Rey ha dicho que el que lo hospede, ¡que se prepare!. Así es que el Cid y sus vasallos, siguieron su camino, llegó Martín Antolinez, para proveer de bienes al Cid, como el Cid estaba empobrecido se le ocurrió hacer unas arcas, y llenarlas de arena, y vendérselas a Raquel, y Vidas (unos judíos), se trató y se las vendió por unos seiscientos marcos.

El Cid parte hacia Cardeña, mientras que Martín Antolinez se vuelve a casa. El Cid se despide de su mujer y de sus hijas y le deja al abad don Sancho unos 150 marcos para que cuide a su familia y le dice que por cada uno que gaste él le dará cuatro más. Se despide y se va (con él se van un centenar de castellanos),

Caminan toda la noche hasta llegar a Castejón, que cae en poder del Cid (por sorpresa). Más adelante en el reino moro de Toledo, tributario del Rey Alfonso, se marcha (pasa de largo porque no quiere lidiar con el Rey Alfonso). El Cid acampa sobre Alcocer, y se enfrenta a los moros que son muchos más que él, derrota a los moros, y se lleva un gran botín, tiene clemencia con los moros, y los pone a servir. Más adelante, el Cid se va de aquí, y vende el castillo de Alcocer a los moros. Entra en el reino del Rey de Barcelona, y este se pone echo una furia, el Cid trata de calmarlo, pero el Rey le ataca, vence el Cid y hace prisionero al Rey, el cual quiere morirse de hambre, el Cid no lo permite y lo deja marchar a cambio de que coma algo.

SEGUNDO CANTAR: BODAS DE LAS HIJAS DEL CID

El Cid se dirige a Valencia, donde poco a poco vence a los moros y al Rey de Sevilla, y se hace con todo el reino de Valencia, manda unos regalos al Rey Alfonso, El Cid envía 100 caballos al rey Alfonso y mil marcos de plata a San Pedro de Cárdena como regalo. El rey perdona la familia del Cid. El Cid crea el obispado en valencia y nombra a don jerónimo como el obispo. Minaya va a cardeña por la esposa y las hijas del cid y todos se encuentran en valencia. Los Infantes que ven que el Cid se hace rico y que esta forrado, y se quieren casar con las hijas del Cid, hablan con el Rey Alfonso, y este le dice arreglan una cita con el Cid, en estas vistas (en el río Tajo) acuerdan que se casen y se casan, el representante del rey Alfonso, que es Minaya, casa a los Infantes con las hijas del rey, el Cid y sus hijas están muy contentos. Pasados unos días cuando el rey marroquí, llamado Bucár, quiso conquistar valencia, los Infantes se echaron atrás en la batalla, y el Cid les dijo que no hacia falta que lucharan.

Cantar segundo, cantar de las bodas.

A partir de aquí, el Cid se dirige a Valencia, donde poco a poco vence a los moros y al Rey de Sevilla, y se hace con todo el reino de Valencia, manda unos regalos al Rey Alfonso. Este los acepta y perdona al Cid y permite que este se lleve a sus hojas y a su mujer, a valencia, Minaya, que es el intermediario, se lo agradece, y se va. Los Infantes que ven que el Cid se hace rico y que esta forrado, y se quieren casar con las hijas del Cid, hablan con el Rey Alfonso, y este le dice arreglan una cita con el Cid, en estas vistas (en el río Tajo) acuerdan que se casen y se casan, el representante del rey Alfonso, que es Minaya, casa a los Infantes con las hijas del rey, el Cid y sus hijas están muy contentos. Pasados unos días cuando el rey marroquí, llamado Bucár, quiso conquistar valencia, los Infantes se echaron atrás en la batalla, y el Cid les dijo que no hacia falta que lucharan.

TERCER CANTAR: LA AFRENTA DE CORPES

Estando el Cid dormido, el león que tenia, se escapó los Infantes se asustaron, y se escondieron, y el Cid se enfrentó al león y lo acobardó. Entonces los Infantes fueron objeto de risas y de bromas. Para vengarse, decidieron ir a Carrión y llevarse a las hijas del Cid, y maltratarlas por el camino, así hicieron y cuando el Cid se enteró avisó al rey don Alfonso y le dijo que quería concertar una corte en la que el pudiera retar a los Infantes de Carrión, y así vengar el mal que

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (23.9 Kb)  
Leer 17 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com