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El trabajo enajenado - MARX

Manuel Tejada ZuñigaSíntesis14 de Julio de 2021

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Para esta ficha he escogido El trabajo enajenado de Karl Marx, el primer manuscrito, su fecha de publicación fue en el año 1844.

Marx nos parte hablando y también como objetivo de este manuscrito es sobre la división del trabajo, la propiedad privada, como el trabajador tiene que despojarse de ser persona y vender su mano de obra para generarle capital a las empresas, en pocas palabras el trabajador u obrero, queda reducido a mercancía, a la mercancía más baja que existe, he ahí la miseria y migajas que tiene que conformarse, que desaparece la diferencia entre obrero fabril y campesino, todo queda reducido a propietarios y obreros desposeídos. Esta economía política, no presenta ningún tipo de fundamento de la división del trabajo y el capital, no es muy transparente y lo único que la pone en movimiento son la codicia y la guerra entre los codiciosos, o sea la competencia. El como el hombre tiene que ir en contra de su propia naturaleza, forzándolo a prestar su fuerza bruta como medio para subsistir.

Esta Enajenación tiene conexiones, tanto con el sistema monetario, como entre la propiedad privada, la codicia, la separación del trabajo, la de intercambio y competencia, etc. Marx nos explica y pone en contexto actual que el obrero es más pobre en cuanto más riqueza produce, es decir  el trabajador se convierte en una mercancía tanto más barata cuantas más mercancías produce. El trabajo no sólo produce mercancías; se produce también a si mismo y al obrero como mercancía y justamente en la proporción en que produce mercancías en general. También se puede entender como la desrealización del trabajador, como pérdida del objeto y servidumbre a el, la apropiación como extrañamiento, como enajenación. Esto produce que el trabajador en cuanto menos llega a poseer, queda mas sujeto a la dominación de su producto, es decir al capital;
 “La enajenación del trabajador en su producto significa no solamente que su trabajo se convierte en un objeto, asume una existencia externa, sino que existe fuera de él mismo y ajeno a el, independiente, extraño, que se convierte en un poder autónomo; que la vida que ha prestado al objeto se le enfrenta como cosa extraña y hostil.” . Esto es una gran contribución al la pregunta sociológica, ya que esto se ha reproducido hasta el día de hoy y así aplicarlo como método de control, para que sigan existiendo las hegemonías de poder a costa de los pobres. Es una contribución significativa al pensamiento sociológico y la manera de entender las relaciones de poder y trabajo.
Marx también nos habla del mundo exterior, la naturaleza, que hace que el trabajador pueda subsistir gracias a aquello, o sea que en cuanto más se apropia el trabajador del mundo exterior, mas se priva de este, como un arma de doble filo, ya que este mundo se transforma en un medio de subsistencia física del trabajador, el trabajador se convierte en siervo de su objeto. Este trabajo produce mansiones para los ricos y chozas para el trabajador,
produce espíritu, pero origina estupidez y cretinismo para el trabajador. La enajenación del trabajo produce infelicidad, el trabajador se siente agobiado, desdichado, desgraciado; no desarrolla una libre energía física y espiritual, más bien mortifica su cuerpo. Esto da un pensamiento en el trabajador que el trabajo que el hace no es suyo no le pertenece, es de otro, así como así mismo el no es parte de el, sino que es propiedad de otro. A cause de esto el trabajador solo se siente libre al realizar sus funciones animales, comer, beber, engendrar, etc. En cambio, sus funciones humanas se sienten como animal.

Por otra parte, tenemos que también el hombre es un ser genérico, que necesita de la naturaleza para subsistir, lo cual quiere decir que la naturaleza es su casa y medio continuo para no morir; el trabajo enajenado afecta esta concepción ya que hace al hombre ajeno a su naturaleza, ajeno de si mismo, la vida misma aparece solo como medio de vida. El trabajo enajenado invierte esta relación, que hace que su esencia, su actividad vital, la haga un simple medio para su existencia. Por esto en un mundo objetivo es cuando el hombre se siente realmente genérico. Una consecuencia también de esta concepción es que el hombre se enfrenta consigo mismo, y al enfrentarse consigo mismo se enfrenta también al otro.

En síntesis el hombre al estar enajenado el hombre de su ser genérico, está enajenado del otro, o sea, de la propia esencia humana.

Por otro lado, Marx cuestiona la legitimidad de los “Dioses” y la iglesia misma en si, dice que todo trabajo y producto del trabajo es netamente para el, cuyo placer sirve solamente para el, o sea que la tierra es de quien la trabaja. Si su actividad es para él dolor, ha de ser goce y alegría vital de otro.
Al enajenarse de su propia actividad posesiona al extraño o deidad de la actividad que no le es propia. La relación de el trabajador con el trabajo engendra la relación de este con el capitalista o patrón. Se puede llegar a concluir que la propiedad privada es consecuencia del trabajo enajenado, pero es mas bien causa y consecuencia de si mismo y esta se transforma en una interacción recíproca.

También hay que comprender que salario y propiedad privada son idénticos, pues el salario paga el producto, el trabajo mismo, es una consecuencia necesaria de la enajenación del trabajo. El salario es una consecuencia inmediata del trabajo enajenado y el trabajo enajenado es la causa inmediata de la propiedad privada
. Al desaparecer un término debe también, por esto, desaparecer el otro.

A modo de cierre y comentario personal, me parece interesante el leer este texto que es de hace mas de un siglo y ver que tales relaciones de poder en conjunto con el trabajo no han cambiado mucho que digamos, quizás hay ciertos cambios, con la llegada de los sindicatos y asociaciones, pero mientras exista este modelo imperante no podrá haber mucho cambio al respecto, es como lo que pasa con la constitución hoy en día, También me hace pensar en las relaciones de personas que conozco que son apatronados, calzan con el perfil que detalla Marx al momento de decir que tienen que rechazar a su vida para poder subsistir, a ser infelices a costa de un salario denigrante, pero bueno, todos los imperios caen algún día y quizás es un poco utópico pensar esto pero bueno, si hay una pequeña posibilidad porque no aferrarse a ella.

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