La Rebelión De Los Colgados Reseña

LA REVELION DE LOS COLGADOS

En este texto literario nos narra la serie de eventos lamentables, tristes y desafortunados que sufre la gente indígena de nuestro país (México), explicando estos acontecimientos desagradables, y poniendo como ejemplo a un hombre indígena de nombre Cándido.

La historia que comienza en un pueblo cerca de una colina agrícola en los alrededores de Chalchihuista, donde los tristes y desafortunados eventos inicia por el abuso ante estos indígenas por parte de personas nombradas como finqueros, los cuales llegaban a despojar las tierras y pertenencias, que por supuesto para muchos de los indígenas era muy injusto, les ponían como escusa la falta de pago, pero lo hacían con la intención segura de que estas pobres personas, no tengan de otra más que ir a otros municipios, para trabajar como obreros. Cuando Cándido, siempre trataba de tener a su familia a salvo (su esposa y sus dos hijos)que por supuesto ama e intenta lo más posible para que lo posible que lo que gana en su trabajo dentro de sus tierras o animales, le rinda y pueda mantenerla. Un día para la mala suerte de este hombre su esposa enfermo, fue entonces que aumentaron su preocupaciones, puesto que apenas podía comprar medicinas con lo poco que tenía, por lo que Cándido tuvo que trasladarla con un doctor, sabiendo que este se encontraba lejos, con el dolor tan intenso de su mujer, decidió montarla en un yegua para llevarla al otro municipio donde se encontraba el doctor, en el camino, por suerte se encontró con unos hombres que conocía, pues eran del mismo pueblo, y decidieron apoyarlo para llevar a su mujer, pues se estaba lastimando con la yegua, al llegar con el doctor, Cándido le conto lo que pasaba con su esposa según lo que ella había dicho, inmediatamente el doctor hiso un chequeo rápido, y confirmo una apendicitis, y que esto ya necesitaba una operación, a lo que el doctor menciono que la operación le valdría 300 pesos, pero con resignación o por buena voluntad al ver que era un indígena y la enfermedad de su esposa empezaba a empeorar, le cobro 200 pesos. El pobre Cándido con tan solo 18 pesos en la mano le era imposible pagar la operación y el doctor ya sabiendo su carencia, y ya que no podía cobrar tan poquito le era imposible operar, este le advirtió que debería conseguir el dinero si es que quería la operación en menos de 3 horas o a su esposa no le quedara más remedio que esperar su pronta muerte, la desesperación le agobiaba a Cándido, mas sin embargo no tenía más opciones, intento conseguir en una farmacia cercana medicamentos para por lo menos aliviar el insufrible dolor de su esposa, pero

hasta el mismo farmacéutico al ver el estado de la mujer, se tenía que hacer una operación de inmediato o moriría, Cándido empezaba a resignarse de la pérdida de su esposa, y solo se ponía a pensar y preocuparse, de que si llegaba a morir su esposa, sus hijos quedarían sin madre, y que le aria un gran falta a él y a su familia, ya que era un gran mujer y muy laboral. El doctor llego de pronto a la farmacia donde se encontraba Cándido este le conto al señor de la farmacia la situación, y el por qué le era imposible realizar la operación requerida, le decía que era necesario comprar los materiales necesarios para realizar la operación, el algodón, el alcohol, se tenía que invertir para tenerlos. Y pues no se podía hacer otra cosa más que esperar, Cándido regreso con sus amigos que cuidaban a su mujer, la cual según los hombres de ahí había despertado y preguntado por Cándido, este se deprimió más, peor todavía que le decían que ya se iba a morir, de pronto un señor al que le dicen don Gabriel apareció, este se veía estresado, y se acercó a la farmacia, donde al parecer lo conocían, este parecía ser un prestamista, el cual se encontraba ahí a causa de que un hombre de ese pueblo aun le debía dinero, y solo esperaría a que se lo entregaran, don Gabriel llego a observar a Cándido todo decaído, y pregunta por su estado, a lo que le cuentan la historia de lo que pasaba, don Gabriel le preguntaba si no tenía quien le prestara dinero para poder pagar la operación, a lo que Cándido respondía que no, pues casi todos tenían crisis económica como la de él, entonces don Gabriel le ofreció pagarle la operación, lo pensó mucho pues sabía que estaría vendiendo su libertad cosa que muchos indígenas conocen y ya muy pocos tienen, don Gabriel le seguía insistiendo que aceptara su oferta, pues además de darle los 200 pesos para la operación le daría 50 pesos más para sus necesidades aparte, además que observo los hombres que venían con Cándido, le sugirió que debía por lo menos invitarles un trago por su ayuda, Cándido estaba cada vez más presionado ante la decisión pues lo pensaba mucho, desde su libertad, su esposa sus hijos, empezó a notar que el tiempo que tenía cada vez era menos, no tuvo más opción que aceptar el trato de Don Gabriel, este sin más preámbulo comenzó a solucionar su apuro, hablo de inmediato con el doctor para comenzar de una vez la operación, rápidamente el doctor llamo una camilla y las enfermeras presentes para que le dieran apoyo durante la operación, después de varios intentos para salvarla, con su problema más agraviado, el doctor hiso todo lo posible, pero sin embargo no fue suficiente, la esposa de Cándido ya había fallecido, cuando el doctor le aviso, Cándido entristeció, sin embargo no dramatizó, y el doctor simplemente le pidió 50 pesos después de todo no se cumplió el objetivo de salvarla, Cándido ahora tenía que encargarse de comprar un ataúd especialmente para su esposa, fue entonces que acudió con un hombre que los fabricaba, este hombre se trató de compadecer de él, y le cobro solo los 18 pesos que ya tenía desde un principio pues esperaba que su esposa fuera sepultada en una caja bonita, hecha de madera y adornada con papel china, después Cándido con duras

penas traslado a su esposa difunta nuevamente a su pueblo para su entierro, en donde sus hijos seguramente no soportarían la noticia de saber que su madre falleció, días después Cándido se decidió salir junto con sus hijos a vender

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