La chica del tren

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SIPNOSIS LIBRO:

Como cada mañana, Rachel toma el tren de las 8:04 h. Cada mañana lo mismo: el mismo paisaje, las mismas casas… y la misma parada en la señal roja. Son sólo unos  segundos pero le permiten observar desde la ventana a una pareja que desayuna tranquilamente en su terraza. Siente que los conoce e inventa unos nombres para ellos: Jess y Jason. Su vida es perfecta, no como la suya. Pero un día ve algo diferente. ¿Y si Jess y Jason no son tan felices como ella cree?¿Y si nada es lo qué parece? Tú no la conoces. Ella a ti, sí.

OPINIÓN PERSONAL:

Estamos acostumbrados a leer y releer historias en forma de narración, de prosa… y pocas veces nos encontramos con una historia contada en forma de diario, una historia contada desde tres partes y hablando sólo de una, lo que ayuda a sentirse como el personaje que narra e interactúa con otros, saber qué es lo que siente y piensa cada una de ellas, haciendo que seas tú quien realmente está dentro de la historia. Cómo he dicho, te hace sentirte dentro de la historia, pero además, la autora lo hace de una forma fácil para el lector, de forma que no se pierda a través de los días de las diferentes personajes, y haciendo que el lector se enganche con facilidad. La autora hace que la obra sea bastante intrigante y lleva muy bien el desarrollo sin destapar el misterio hasta el final.

Una novela 100% aconsejable para aquellos lectores que les apasione el misterio y la intriga. En mi opinión, la autora hace un trabajo excelentísimo al narrar una historia desde tres puntos de vista: Rachel, una mujer deprimida y alcohólica, debido al divorcio con su ex marido Tom Rachel coge el tren de las 8:04 h. cada mañana y en la parada con esa señal roja siempre se fija en una pareja a las que nombra como Jess y Jason. Otra de las narradoras de la historia es Megan (Jess) quien desaparece y Anna, la actual pareja de Tom.

Es interesante cómo te puedes meter en la cabeza y piel de cada personaje, siendo cada una tan distinta de las demás. Otro aspecto que me ha encantado son los giros inesperados que van apareciendo, porque me encanta que cuando está casi cerrada la historia cambie y haga que no siga una estructura tan lineal de principio, cuerpo y desenlace, así, creo que molan más, volviéndonos locos y locas a los lectores.                

Siempre me gusta dar las gracias cuando me dan algo que me encanta, y como es de suponer, mi agradecimiento va dedicado a Paula Hawkins, una autora que descubrí con “La chica del Tren” y con la que espero seguir intrigándome con sus obras de arte. También a esa persona que me lo mostró y me animó a empezarlo y con la que me gustó muchísimo comentarlo de forma tan entusiasmada.

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