Semillas de papaya a la luz de la luna

Semillas de papaya a la luz de la luna :

| Julieta Suárez | Materia: Literatura | Escuela Parroquial la Merced | 6° de M.H.M |

En este trabajo desarrollare un análisis sobre lo que fue la vida de las prostitutas dentro del libro Semillas de papaya a la luz de la luna, escrito por Ana Moya. La escritora nació en 1954, en Tucumán, Argentina. Fue criada dentro de una familia de libreros. Se recibió de abogada. Se desempeñó como defensora oficial penal en el distrito 5 de la Provincia de Salta. Comenzó su carrera literaria en el año 1997, cuando publicó el volumen de cuentos Sangre tan caliente y otras pasiones. A lo largo de su carrera, Ana Gloria Moya recibió diversos premios.

             ¿Qué tendrán para decir las mujeres de mala vida? Esas a las cuales su destino parecía estar marcado a fuego. Adecuada, impecable y totalmente acertada la descripción que usó Ana Gloria para relatarnos lo que era vida de una prostituta en esa época. La lujuria traída desde España fue invadiendo el suelo americano.Se relata la vida de las prostitutas en los burdeles de España, especialmente la vida de Juana es rubia, baja, blanca y opulenta. Hija y nieta de prostituta, de quienes aprende la profesión. Creció en medio de la soledad y la lujuria. Aprendió mientras jugaba con muñecas mal armadas, los secretos del comercio sexual. Un día decide no continuar trabajando en los burdeles y cambiar de vida, razón por la cual organiza un plan para cruzar el océano hacia el nuevo continente del que le hablaban sus clientes. Se convierte en doncella de Beatriz. Vive angustiada por el peligro que amenaza a Guatemala y se arrepiente de haber ido a ese lugar,finalmente muere en el terremoto.        

En espicial la vida de esta desdichada prostituta muestra lo marginada y triste que era la existencia de las prostitutas en esa época. Es muy cruel ver la forma en que eran tratadas estas infortunadas mujeres, ya que no hay derecho de que una persona se sienta avergonzada de quien es, de que no se pueda aceptar y de quiera empezar una nueva vida para poder olvidar la anterior. Es muy triste e inaceptable que la mirada “moral” de una sociedad provoque todos esos sentimientos en una persona.

Estos sentimientos son claramente vistos en Juana, quién lamentablemente solo encuentra su paz en su muerte. Esta pobre mujer, debido a su marginación social, se encontraba tan perturbada que entiende su muerte como un castigo del Señor por haber tenido la ambición de una vida nueva en un lugar nuevo. Se consuela con la idea de haber terminado con la mala suerte de su familia, y en ese momento por fin logra sentirse libre y tranquila.

“¿Yo? Yo estoy bien, desorientada pero bien. Siempre estuve perdida, conversando con mi abuela, yendo y viniendo entre vivos y muertos, buscando la felicidad. No sé si vine hasta acá empujada por ellos, por mi abuela y su sueño del muchacho moreno y dulce, o porque yo quise. Pero no me interesa ya saberlo. No me duele nada, estoy entera, en paz. Nadie me da explicaciones que no quiero conocer. No es tan malo después de todo estar muerta. Quizás ofendí al Señor, demasiado ambicioso eso de querer vivir dos vidas en dos mundos. Y ni siquiera pude vivir una completa… pero bueno. Cumplí el sueño de mi familia de romper la cadena de putas. La rompí del todo. No dejé siquiera una hija para que rezara por mi alma….

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