Virus del papiloma humano

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Virus del papiloma humano

Docente

Andrea Gianoki

Alumnas

Francisca Fernández y Danae Manzo

Asignatura

Citopatología I

Introducción

    El virus del papiloma humano (VPH) es una infección de transmisión sexual (ITS) común, provocada por un virus de la familia Papillomaviridae (1)(2). Comúnmente causa crecimientos en la piel o en las membranas mucosas, como verrugas genitales, aunque también puede afectar a la garganta y a la boca (2). Hay más de 200 tipos diferentes de VPH, y algunos de ellos son considerados de alto riesgo porque pueden conducir al cáncer (2). La mayoría de las personas con VPH no presentan síntomas, pero si no se detecta y trata, puede ser una causa de enfermedades graves como el cáncer cervical en las mujeres o el cáncer de ano en hombres y mujeres (4). Para esta infección existen diversos métodos de prevención, como la realización de pruebas de Papanicolaou (PAP), utilización de preservativos y las vacunas contra VPH (13).

Desarrollo

    Según información proporcionada por el Gobierno de Chile, la incidencia del virus del papiloma humano (VPH) representa el 6,6% de todos los casos nuevos de cáncer a partir de 2018, lo que lo convierte en el tercer tipo de cáncer más común en incidencia y el sexto en mortalidad (5)(6). También está relacionado con cáncer de varios órganos como amígdala, garganta, faringe, esófago, mama, ovario, piel, próstata y uretra (6). Para este virus existen una serie de vacunas para prevenir la infección de VPH en hombres y mujeres (8).

Actualmente, el Instituto de Salud Pública de Chile ha aprobado tres vacunas para la prevención del cáncer cérvico uterino, que se diferencian entre ellas en las proteínas L1 de los diferentes tipos de VPH de alto riesgo (8). Así, se dispone de una vacuna nonavalente (protege contra 9 tipos), una tetravalente (contra 4 tipos) y una bivalente (contra 2 tipos) (8). A partir del segundo semestre del año 2014, la vacuna VPH tetravalente fue incorporada al Programa Nacional de Inmunización (PNI) (8). Se trata de una vacuna recombinante, inerte, no infecciosa, e indicada para la prevención de lesiones genitales precancerosas (cervicales, vulvares y vaginales), cáncer de cuello de útero y verrugas genitales causadas por los tipos 6, 11, 16 y 18 del VPH (8).

La vacuna utilizada actualmente es Gardasil o también llamada recombinante tetravalente, esta fue incorporada en 2014 en Chile, la cual contiene L1, que son proteínas que semejan a los viriones naturales y que son capaces de generar una respuesta inmune humoral (9).

Esta vacuna protege a mujeres y hombres de 9 a 26 años con el fin de prevenir la infección por los tipos 6 y 11 de VPH de riesgo bajo que producen la mayoría de las verrugas genitales (10). También protege contra los tipos 16 y 18 de VPH de riesgo alto que producen gran parte de las lesiones precancerosas y los cánceres de cuello uterino, vagina, vulva y ano, además previene el cáncer de pene y de orofaringe relacionados con el VPH (10).

El esquema de vacunación contra VPH del Programa Nacional de Inmunización (PNI) consiste en inmunizar a las niñas de 4° (primera dosis) y 5° básico (segunda dosis) de todos los establecimientos educacionales del país, con el objetivo de protegerlas contra el cáncer cérvico uterino (CC), que tiene las mayores tasas de morbi/mortalidad (8). Además, la vacuna protege contra otras enfermedades causadas por el VPH, como las verrugas genitales (8). A partir del año 2015, se implementó también una estrategia de “catch up” o “puesta al día” para vacunar a las niñas de 6° a 8° básico, de manera que todas las niñas que egresen de enseñanza básica estén protegidas contra el VPH (8). En octubre del año 2018, el Consejo Asesor de Vacunas e Inmunización (CAVEI) del MINSAL recomendó la incorporación de la vacuna VPH en el programa de Inmunización en varones de 4° año básico, considerando que la infección por VPH representa un problema de salud pública nacional y mundial, y afecta tanto a población femenina como masculina (8). El objetivo de esta medida es reducir la infección por VPH y las lesiones tumorales asociadas en hombres y mujeres, como las de tipo maligno y premaligno, a nivel genital y oral (8). Además, como antecedente, se hizo notar que la población con cáncer anal y carcinomas de células escamosas de orofaringe no cuenta con herramientas de tamizaje que permita la detección precoz, generando así un diagnóstico tardío en la población masculina con cáncer asociado a VPH (8). Es por ello que el MINSAL ha decidido incorporar al calendario de vacunación 2019, la vacunación contra el VPH a los niños de 4° básico (8). El esquema utilizado en Chile desde 2019 para esta vacuna, consiste en dos dosis para niñas y niños menores de 15 años (8).

En cuanto a los efectos secundarios y contraindicaciones, las vacunas contra el VPH son seguras y rara vez causan efectos adversos graves. Los más comunes incluyen dolor en el área de la inyección, fiebre y dolor de cabeza. Para comprobar estas reacciones se realizaron varios estudios para evaluar los efectos provocados por Gardasil, donde aproximadamente el 17 % de los vacunados fueron víctimas de dolores de cabeza y cerca de 3 pacientes de 4 (77 %) presentaron una reacción en el lugar de la inyección (inflamación, dolor, picor o hematoma), también es posible de aparezcan otros efectos secundarios como náuseas, vómitos, dolores al nivel de las extremidades, fiebre, vértigos y mialgias (dolores musculares)(11) e incluso la vacuna puede causar un síncope (pérdida del conocimiento) en ciertas personas(11).

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