Desarrollo De La Notación Musical

Escuela de Música “Sebastián Echeverría Lozano”

Cátedra de Historia de la Música I

Desarrollo de la Notación Musical

Profesor: Miguel Rodríguez

Estudiante:

Ramón Márquez

C.I.:19.642.401

Valencia- Edo. Carabobo

09-01-2014

Se conoce que la notación música comenzó a desarrollarse en la humanidad, según historiadores, antropólogos y paleólogos, durante el desarrollo y crecimiento del imperio egipcio, a su vez, se han conseguido vestigios que demuestran de la existencia de escrituras cuneiformes que servían de guía para la entonación melismática sobre las silabas de escritos babilónicos. Dicho esto, es fácil decir que la humanidad ha sentido durante milenios la necesidad de desarrollar una notación que ayudase a perpetuar la representación de sonidos enfocados en cantos mítico-religiosos.

Luego, con el fenómeno de las invasiones, los pueblos griegos dejaron, por consecuencia de esto, un legado inmenso en lo correspondiente al desarrollo de notación musical que más tarde serviría de base para el crecimiento del conocimiento musical romano, pues así como los griegos, todas las culturas anteriores se basaban en su alfabeto para la representación de sonidos, lo cual se volvía insuficiente debido al desarrollo de nuevos instrumentos musicales y así como también a las necesidades sonoras que convenían con este desarrollo, por esto los romanos fueron el soporte y el impulso que promovió el desarrollo de una notación que siglos más tarde evolucionaria en una parecida a la que conocemos en la actualidad.

La iglesia siempre tuvo una gran influencia en el desarrollo de la música, y es en la época medieval cuando se comienza a utilizar las notaciones neumáticas para designar de una manera más directa y precisa la entonación y pronunciación de cantos bíblicos, dicha notación se desarrolla por la necesidad de transmitir a los monjes nuevos la información relacionada a los cantos puesto que no existía ningún tipo de transcripción, mas a su vez se utilizaba la memoria y la repetición para transmitir la información de generación en generación.

Es en el Medioevo donde se desarrolla de mejor manera la música litúrgica cristiana y de este modo también se desarrollan métodos de enseñanza basados en la notación neumática. El avance en este tipo de notación se le atribuye al monje Güido D’Arrezzo, quien se baso en el Himno a San Juan Bautista, puesto que la primera silaba cada frase o cada línea de dicho himno comenzaba un tono por encima de la primera silaba de la frase anterior, y de este modo pudo Güido establecer un parámetro directo relacionado a las notas musicales y a la altura en la cual debía entonarse cada cual, el Himno a San Juan Bautista estaba escrito asi:

De aquí partieron un sinfín de cambios, arreglos, mejoras, modificaciones. El primero de ellos y determinante para el entendimiento de las notas

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