Humor Inteligente

La actuación de Jack Nichoson se destaca en cualquier producción y en Mejor Imposible no es la excepción, pues interpreta a Melvyn un escritor de novelas con una personalidad obsesiva y meticulosa en todos los aspectos de su vida, este solitario hombre es vinculado de una manera majestuosa, por el director y guionista James Brooks, quien vincula a esta historia a Greg Kinnear interpretando a Simon un artista homosexual que es vecino de Melvyn y Helen Hunt o Carol en la historia que tiene que soportar al maniático escritor en el restaurante donde trabaja.

Las conversaciones que se crean entre estos personajes tienden a ser jocosas e irónicas, pues así como pueden comenzar con tonos de amabilidad terminan de manera fulminante con una frase sincera o inapropiada, especialmente por parte de Melvyn que es bastante insensible y egoísta; sin embargo la vida de todos se transformara por la intervención que el uno hace en el otro.

A mi manera de ver, la personificación que cada actor le da a los miembros de esta historia, es perfecta, porque se construyen individuos que tienen unos roles definidos en la historia tanto socialmente como en un pasado que no conocemos de manera explicita pero debe existir, pues asumir la creación de alguien ficticio implica una transformación que haga creer a los espectadores la existencia de esas representaciones, definitivamente tienen acabados excelentes.

Valga mencionar que esta comedia es inteligente, no es una historia que especifique el momento divertido y robe carcajadas a la audiencia (sin desacreditar las que si tienen humor explicito), en vez de eso los diálogos y la manera de ubicarlos en la historia construyen situaciones tan divertidas, tal vez por lo crueles o fuerte, pero finalmente graciosas.

Definitivamente no perderán tiempo, pues la satisfacción de haber disfrutado esta comedia inteligente, es como un plato delicioso, que dan ganas de repetirla.

Vi la película y quede muy pensativo, como que esperaba algo mas o de pronto alguna acción que provocara una emoción fuerte, no se; aunque se le puede dar un buen calificativo, por ser una propuesta diferente que invita al espectador a reflexionar sobre una historia de amor, desamor, infidelidad y sexo.

Siempre esperamos de una película un momento que impacte, personajes que se desenvuelvan en algún bando pero no, esta cinta dirigida por Mike Nichols nos muestra a cuatro personajes que tienen un factor en común en la historia, son amados, ilusionados y traicionados, lo mas curioso de todo es que es entre ellos mismos; a la vez que sus puntos de atracción surgen de un primer impacto pues no se desarrollan historias de amor con el preludio que normalmente se da(se conocen son amigos -por lo menos un poco- y luego si entran en un compromiso) esto no se ve aquí, la atracción de primer impacto es la que cuenta, no me atrevo a decir que amor a primera vista.

Natalie Portman interpreta majestuosamente a Alice una joven bailarina de cabaret, que acaba de terminar una relación sentimental, y por eso llega a Londres donde se encuentra por accidente (literalmente), con Dan un periodista de obituarios interpretado por Jude Law, entre ellos comienza una historia de amor hasta que aparece Anna interpretada por Julia Roberts, una fotógrafa que a raíz de un beso con Dan, desborda un mar de amor entre los dos, que posteriormente con la llegada de Clive Owen interpretando a Larry, armaran una turbulencia en la que todos reirán y llorarán gracias al amor.

Es interesante la forma en que muestran los extremos a los que pueden llegar las personas cuando están o creen estar enamoradas, rivalidades, masoquismo, infidelidad y todo tipo de sentimiento tal vez desconocido en si mismos y que solo surge en estas situaciones; sin mencionar los suspicaces diálogos entre los personajes, que desarrollan una atmosfera cómica y

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