La Película de Patch Adamas

La Película de Patch Adamas me gustó mucho ya que nos enseña que un buen médico no es solamente aquella persona legalmente apta para ejercer el arte de la medicina, con prolongadas horas de prácticas y excelente promedio académico, sino que ser médico conlleva muchas cosas más.

Como por ejemplo un buen médico no solo trata a la enfermedad sino al individuo que padece esta, que escribe una historia de sentimientos y de eventos, que no solo examina signos y síntomas físicos si no también emociones, que busca una mejora de la enfermedad al igual que busca conducir a una paz espiritual y emplea su personalidad de manera consciente, sabia y benévolamente, con pleno conocimiento de sus propias debilidades y flaquezas

Esta película también nos enseña que la relación médico-paciente es la convivencia y comunicación armoniosa que un buen medico sostiene con su paciente, para bridarle a este un trato digno y respetuoso, demostrándole la importancia que tiene su vida; y es que hay que dejar atrás la problemática que abarca a la medicina hoy día en donde la relación con el paciente ya no es buena ni mala, sino que simplemente ha dejado de existir y es que se nos ha olvidado que la actividad del médico existe gracias a la existencia de otros seres a quien ayudar y a quien proteger, porque no es solo de ciencia de lo que se nutre la medicina, sino del amor al prójimo y del espíritu de servicio porque de nada sirve una mente brillante que no tiene afán para compartir el conocimiento y que este tenga un beneficio para el bien común.

Otro aspecto importante es que las instituciones no solo se deben formar médicos con grandes logros académicos, si no formar médicos con gran ética moral; que se comprometan con la persona y su único fin sea ayudar en todos los aspectos a su paciente

En conclusión ceo que esta película nos deja un mensaje claro, que con una sonrisa, con unas palabras, una mirada, o un apretón de manos puede que no curemos al paciente pero si transmitimos una fortaleza tanto para el paciente como a sus familiares que pueden ayudar a su mejoría y que a la larga otorga más beneficios que la objetividad que da el conocimiento empírico

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