RESEÑA DE LA PELICULA "Y LA BANDA SIGUIÓ TOCANDO"

¿Por qué la película se titula “And the Band Played On”?

Son diversas las hipótesis que existen sobre el origen del nombre de la película “La banda siguió tocando”, una de ellas señala que el nombre hace referencia a los hechos ocurridos el día del naufragio del Titanic donde la banda del barco no dejó de tocar pese a la gran multitud aterrada y descontrolada que había esa noche, otra teoría apunta a que el nombre es debido a que durante la segunda guerra mundial mientras casi la mitad de la ciudad de Berlín había sido tomada, el teatro de la ópera no solo permanecía abierto sino que la banda seguía tocando y a la poca o mucha audiencia le caían los pedazos de escombro sobre la cabeza durante los bombardeos.

Me parece que aunque son hipótesis basadas en hechos distintos en tiempo y espacio coinciden en que la situación que acontecía era de pánico, miedo e ignorancia y los músicos de ambas bandas ante esto prefirieron no hacer nada continuando con la vida que tenían o simplemente aceptando su destino en silencio, hecho que podemos experimentar en la película cuando muchas personas debido a la exclusión social que se les profesaba e incluso a su automarginación comienzan a fluir en un mar cuyas olas arrastran a todo sin importarle si se es hombre o mujer. Simplemente mucha gente dejó de luchar y así como se dijo en una de las escenas, dejaron de ser humanos, para convertirse en un número más en la cifra de la “enfermedad rosa”.

¿Cuál fue mi escena favorita?

Durante la película-documental observé muchas escenas que me gustaron pero la que definitivamente me impactó fue el momento en que los científicos y médicos más prestigiados de Estados Unidos de América debatían varios asuntos sobre el SIDA. La razón de mi asombro fue que lo último que hubiera imaginado ante una situación donde la enfermedad aún empezaba a ser aceptada como una que no solo afectaba a hombres homosexuales, sino a cualquiera e incluso así se mantenía la exclusión social de todos los infectados, que ya se había comprobado que no solo se transmitía sexualmente sino también por transfusiones, que el número de casos aumentaba cada día y la probabilidad de muerte seguía siendo la misma 100%; y pese a toda esta gran carga estos profesionistas solo tenían en mente dos cosas: el reconocimiento público de su “labor” y en la cantidad de dinero que se “perdería” al incrementar presupuestos para investigación de una prueba para la detección que fuera confiable, una vacuna, e incluso programas para su profilaxis y es ahí donde se hace mención de la siguiente frase que me tomo la libertad de citar: “cuando los doctores actúen como hombres de negocios a dónde pueden ir los pacientes en busca de médicos…”, no había mejor frase para esta escena en donde se deja a un lado la ética profesional y donde los humanos pierden su humanidad y se convierten en una simple cifra vacía de defunciones ante un montón de médicos y científicos que un día juraron tener una sola misión en la vida y esa era curar.

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