Conceptos De Administracion

CAPITULO1: CONCEPTOS DE ADMINISTRACION

LA ADMINISTRACION: ¿CIENCIA Y TECNOLOGIA O PERSUACION?

Las maneras de resolver problemas y las soluciones científicas

Suele definirse a la administración como la disciplina que se ocupa de coordinar los recursos disponibles en una organización para conseguir el fin que se ha propuesto. Frente a una organización concreta, un primer problema podría ser cual es el objetivo u objetivos que persigue; podría no estar claro no ser igual para distintos miembros de la organización, puesto que cada uno puede tomar decisiones diferentes ante la misma situación. El gestor es el encargado de alinear los objetivos de los integrantes de la organización con su fin principal. El gestor resuelve los problemas según aprendió de sus superiores, es decir, por tradición; o según le indica su experiencia al resolver problemas idénticos o semejantes en otras organizaciones. La mejor manera es la que se denomina “solución científica”, es decir, recurrir a aquellas soluciones que se basan y concuerdan con los hechos, y que se obtienen a la luz de teorías o modelos probados.

Soluciones científicas

Si la administración es científica, no solo hay mejor manera de resolver los problemas, sino que en el largo plazo esos problemas serán solucionados de forma cada vez mejor.

Se define brevemente que es la ciencia. Hay dos maneras de definirla, por su característica o por su método. Bunge la define por sus características: especializado, claro y preciso, comunicable, sistemático, metódico, verificable, legal, explicativo, predictivo y abierto. Popper la define por su método, propone que se caracterice a la ciencia empírica por sus métodos, o sea, por nuestra manera de enfrentarnos con los sistemas científicos, por lo que hacemos con ellos y lo que hacemos a ellos. El conocimiento científico es la clase de conocimiento que se somete a crítica, en especial, a la forma más severa de crítica: cotejar un enunciado con la realidad.

El método

Manera de resolver cualquier problema relativo a los hechos:

1. Formulación del problema.

2. Formulación de la hipótesis (una solución)

3. Derivación de consecuencias observables: cotejarse con la realidad. Se extraen de ellas consecuencias observables.

4. Cotejo consecuencias-realidad: cotejarse directamente con la realidad.

5. Estimación provisoria de la hipótesis: prestan apoyo o refutan la hipótesis.

6. Nuevo problema: nunca una solución queda probada definitivamente. Se deben elaborar nuevas hipótesis para intentar resolver mejor el problema, siempre estamos ante un nuevo problema. Aunque una hipótesis se rechace, el científico intentará encontrar mejores hipótesis.

Clases de ciencias (fácticas y formales)

El criterio contemporáneo de clasificación de las ciencias ha cambiado a lo largo del tiempo. En lugar de proponer criterios filosóficos, se propuso un criterio lógico acerca del cual no hay divergencias.

Las que están compuestas exclusivamente por enunciados analíticamente verdaderos se denominan “ciencias formales” (lógica y matemáticas). Aquellas disciplinas que incluyen contingencias de denominan “ciencias fácticas” y estudian los fenómenos o hechos de la realidad. Las ciencias fácticas poseen un solo método: el método empírico. Es decir, para comprobar la verdad o falsedad de un enunciado, se lo coteja con la realidad. Se denomina “enunciado observacional” o “dato” al enunciado singular que expresa percepciones; es el tipo de enunciado más seguro desde el punto de vista del contenido.

Ciencia básica, ciencia aplicada y tecnología

Al aplicar el método científico se obtienen: ciencia básica, aplicada y tecnología.

La ciencia básica consiste en aplicar el método científico con el objetivo de conseguir leyes científicas que reflejen las pautas objetivas recurrentes de la realidad. La ciencia aplicada considera las leyes científicas de la ciencia básica para evaluar su aplicación o utilidad. No busca nuevas leyes, investiga la utilidad de las mismas. La tecnología tiene otros componentes; su objetivo es basarse en las leyes de la ciencia básica o aplicada para generar conocimiento. Sin embargo, no hay tecnología si no se utiliza el método científico. La tecnología es más rica; incorpora facetas que no posee la ciencia.

La administración como ciencia y el programa simioniano.

Considerar a la administración una ciencia ha tenido muchos defensores. Uno de los más lucidos ha sido Hebert Simon. Simon analiza los principios de la administración y puntualiza que estos vienen de a pares. También afirma que el conocimiento científico puede establecer verdades-falsedades de hecho, pero no puede determinar si un fin, objetivo o criterio es verdadero. Simon habla los distintos tipos de enunciados: informativos, que pueden ser verdaderos o falsos; directivos, que incitan o inhiben una acción, y que no son verdaderos o falsos, sino buenos o malos, convenientes o no. Los informativos son los únicos que forman parte de la ciencia; los directivos son órdenes, preguntas, imperativos, prescripciones legales o de otro tipo. También reivindica una vez más la diferencia entre lo fáctico y lo imperativo, y que los enunciados de la administración se refieren a lo observacional para probar su verdad o falsedad.

La administración como tecnología

Mario Bunge ubica a la administración dentro de la tecnología, especialmente dentro de las tecnologías sociales. Implica que la teoría administrativa no enuncia leyes, sino hipótesis o reglas tecnológicas. Es científica porque emplea el método científico y se base en el conocimiento sustantivo de otras ciencias básicas.

EL ROL DEL ADMINISTRADOR

El administrador en la Argentina actual

La responsabilidad del administrador consiste en generar capacidad de “gestión” para lograr los objetivos de una organización, o un sector de la misma. Decimos que el administrador es un “hombre de acción”. Es imprescindible que el administrador este capacitado para responder a los siguientes interrogantes:

a) ¿Qué es una organización? Es un sistema social y tecnológico.

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