EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LA ADMINISTRACIÓN

EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LA ADMINISTRACIÓN

Las planeaciones encabezadas y organizadas por personas consideradas responsables

del proceso administrativo como lo es: el planear, organizar, dirigir y controlar las

actividades han existido ya desde hace miles de años atrás.

Como ejemplo tenemos la Gran Muralla China y las pirámides de Egipto que son pruebas

verídicas de que muchísimo antes de la edad contemporánea se iniciaba proyectos de

gran envergadura en los que había la participación de miles de personas.

Las pirámides son un gran ejemplo que llama mucho la atención. La construcción de una

pirámide daba ocupación a más de 100,000 empleados durante 2 décadas. Viendo y

leyendo esto, nos preguntamos lo siguiente: ¿Quién decía a cada persona la actividad

que tenía que hacer?, ¿Quién supervisaba que hubiera las suficientes piedras en el lugar

de la construcción para que los trabajadores no se quedaran sin hacer nada? Y bueno no

cabe duda que la respuesta es que fueron los administradores o gerentes como

denominaban en esa época que realmente se desconoce.

Mediante lo que vemos es que por ley alguien tenía que ser el encargado de planear las

actividades, de cierta forma organizar a los trabajadores y a los distintos materiales,

además de eso dar la educación oportuna y la dirección a los albañiles para que todo

salga de acuerdo a lo que tenían en mente hacer.

Como otro ejemplo de que la administración ya existe hace muchos años atrás es la

ciudad de Venecia, en Italia, conocido como un destacado centro comercial y económico

del siglo XV. Se menciona esto porque las personas residentes de Venecia inventaron un

modo inicial de darse la empresa privada y así practicar varias tareas que son comunes

en las entidades actuales. Como por ejemplo, en los astilleros venecianos se lanzaban

barcos de guerra que flotaban por los canales. En paradas siguientes se incrementaban

materiales y aparejos. Además de esta línea de montaje, los residentes venecianos

también tenían mecanismos de almacén e

inventario para dar control a los materiales, delegación de administración de recursos

humanos para controlar así la fuerza laboral y también ya en esa época disponían de un

sistema contable de ingresos, costos y gastos.

Los ejemplos mencionados como podemos notar nos demuestran que las empresas y los

administradores ya existía desde hace miles de años atrás.

Para el estudio del proceso de la administración, resultan particularmente importante 2

acontecimientos antes del siglo XX.

Primero, en el año de 1776, Adam Smith hizo la publicación de “La riqueza de las

naciones”, un libro en el cual argumentó los beneficios que generaba para las empresas

y para la sociedad la división del trabajo, así como, la descomposición de los trabajos en

tareas específicas y repetidas. Smith usó como ejemplo la elaboración de alfileres. 10

individuos, haciendo cada uno una tarea determinada, producían juntos

aproximadamente unos 48,000 alfileres por día. En cambio, si cada uno trabajara por su

propia cuenta y realizara todas las tareas, sería todo un logro que terminara 10 alfileres

en un día. Smith concluyó que la división del trabajo incrementa la productividad

porque se perfecciona la destreza y la habilidad de los empleados, se ahorra el tiempo

ocioso al cambiar de una tarea a otra, y con la invención de técnicas y máquinas se

ahorra mano de obra.

La popularidad de la particularización del trabajo obedece sin duda alguna a los

beneficios económicos descubiertas por Adam Smith.

La segunda influencia significativa, antes del siglo XX, en la administración fue la

denominada Revolución Industrial, que empezó en Inglaterra y cruzó el Atlántico a

finales de la Guerra Civil estadounidense. La Revolución Industrial reemplazó la fuerza

de los seres humanos con la gran potencia que tenían las máquinas, lo que ya de por sí

abarató la manufactura de bienes en las fábricas, y que a su vez hizo más económico

manufacturar los productos en las fábricas en vez de los hogares. Estas fábricas

eficientes y grandes no cabe duda de que requerían destrezas administrativas debido a

que los gerentes tenían que pronosticar la demanda, asegurar que hubiera la cantidad

suficiente de materia prima para confeccionar los productos, asignar tareas a los

súbditos, dirigir las actividades diarias, etc.

Y fue así como surgió la necesidad de una teoría formal que ayudara a los

administradores a dirigir grandes organizaciones. Sin embargo, hasta la llegada del siglo

XX no se dio el primer paso en la formulación de dicha teoría.

Hemos analizado un par de ejemplos de casos en los que nos damos cuenta que la

administración

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