Empleados O Empresarios: ¿Qué Gran Dilema?

Empleados o empresarios: ¿Qué gran dilema?

Por: Johnny Castro Alvarado

“Se termina de estudiar, nos graduamos y luego qué?”

Para muchas personas, el fin de sus estudios va acompañado de una gran decisión: Aplico para incorporarme como empleado en alguna empresa, o creo mi propia empresa.

Ambas decisiones que tome tienen significados trascendentales para su vida. Si se incorpora como empleado de alguna empresa o industria, tiene muchas tranquilidades, un salario regular, ingresos estables, un trabajo constante, a veces cierta actividad rutinaria pero al fin, compensa la tranquilidad que se tiene.

Otras personas se deciden por crear su propia empresa, pero esta es una decisión que tiene condiciones y requisitos. Antes de tomar esta idea, es recomendable leer literatura sobre este tema, por ejemplo en Wikipedia, que nos puede ayudar a orientarnos sobre el tipo de empresas que hay y su clasificación. La idea debe estar clara, y se debe tener gran seguridad, porque en adelante, se deben generar gastos en el proceso. Se debe estar claro quiénes van a ser los socios, cual el capital con que vamos a iniciar, y como quedara estructurada la junta directiva de la empresa. Lo que deben hacer primero implica costos legales, se debe definir el nombre que queremos para nuestra empresa, presentarle la información a un abogado para que inicie los trámites de registro de nuestra empresa en el Registro Nacional. Ahí se deben realizar varios trámites, entre ellos verificar si ya el nombre existe igual o similar a otro anterior y que pueda generar confusiones, clasificar el tipo de empresa, luego se inicia el proceso de creación de la nueva empresa, con su propia identificación, cedula jurídica y personería jurídica.

Este fue apenas el primer paso, posteriormente, se deben adquirir en una librería libros de Contabilidad para llevarlos a la Dirección General de Tributación Directa y que se los autoricen. Además, se le da un documento que es el que oficialmente registra su empresa como un contribuyente más en el país, y que le permite realizar actividades económicas. Con ese documento, debe ir a una imprenta para que le confeccionen facturas y recibos para poder realizarles los cobros a sus clientes.

Es en este momento que empieza la vida real de la empresa. Las actividades siguientes deben realizarse de forma ordenada y con cautela. Se debe definir un sitio para la empresa, donde se va a ubicar geográficamente, y que sea accesible para los clientes, pero si es posible, estar cerca de su mercado de trabajo. Luego, agregarle el equipo necesario para su funcionamiento, computadoras, teléfonos, mobiliario y equipo de oficina, y contratar el personal necesario para la empresa. Todos estos rubros significan gastos, por lo que al realizarlos, debe contar con presupuesto, y estar seguro de su potencial de ingresos, de lo contrario, puede iniciar sus actividades en un ambiente más austero, como por ejemplo, desde la cochera de su casa, como han iniciado grandes empresas a lo largo de la historia.

Tener nuestra propia empresa no significa que vamos a tener mayor tranquilidad, o que siempre vamos a tener mayores ingresos, esto es una variable del mercado y no siempre la podemos controlar. Habrá momentos de abundancia y otros de escases, donde algunas empresas se sostengan, y otras terminen sucumbiendo ante las crisis. Es muy importante ser ordenado, metódico, y tener clara la visión a corto, mediano y largo plazo de la empresa. Hoy en día, que vemos un mundo afectado por la globalización, la competencia es cada vez mayor, y una de las mejores estrategias para estar mejor preparados es la innovación. Esta debe formar parte del pensamiento de la empresa, así como una constante capacitación de su gente.

Referencias bibliografícas:

http://es.wikipedia.org/wiki/Peque%C3%B1a_y_mediana_empresa; Pequeña y mediana

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