Bullying: Múltiples caras de una problemática social

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IV Semestre

Psiquiatría I

Profesor: Sergio Zamora

Ayudante: Sergio Zamora

Bullying:

Múltiples caras de una problemática social

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Integrantes:

Carla Vera

Cristina Pinto

David Pons

Luis Bahamonde

17/11/2016

1. CARACTERIZACIÓN DEL FENÓMENO

El Bullying o matonaje escolar es definido como: el hostigamiento permanente que ejerce un individuo o grupo, a otro sujeto o grupo, en forma repetitiva. Dicho hostigamiento se sustenta en una relación asimétrica de poder, en la cual el más débil no puede responder las agresiones del más fuerte (Toledo, 2009). Guarda también relación con el ejercicio intencional de agredir, amenazar y/o dañar física y/o psicológicamente a un par, diferenciándose así de otros fenómenos de agresión o violencia. Considera una forma de violencia que debe cumplir tres criterios:

1. Ser una conducta con intención de producir daño a otro.
2. Llevarse a cabo en forma sistemática y repetida en el tiempo.
3. Presentarse en el contexto de una relación interpersonal que presenta un desequilibrio de poder (Olweus según Reyes 2011).

Según la definición de Harel-Fisch (2011), esta forma de agresión puede ser física, verbal o no verbal, puede ser indirecta o relacional (daño a una relación social), por expulsión social, por esparcimiento de rumores o por coacción a otro para que intimide a la víctima.

Respecto a los criterios para identificar la presencia de bullying, Olweus (2011) propone 3 características que deben cumplirse:

1. Que la víctima se sienta intimidada, excluida o perciba al agresor como el más fuerte.
2. Que las agresiones sean cada vez de mayor intensidad o en privado.
3. Que al principio se interpreten como juego.

Prevalencia de Bullying en Chile

Según una encuesta mundial que realizó la OMS sobre violencia y salud de estudiantes de entre 13 y 15 años, en la cual participó Chile, se indica que un 42% de las mujeres y un 50% de los varones reportan haber sufrido bullying en los últimos 30 días, contexto en que el reporte de los demás países fluctuaba entre el 20 y el 65% (Reyes, 2011).

En Chile, la participación de los estudiantes en conductas de bullying oscilaría entre un 35 a 55%. Según estudios del clima al interior de la escuela, hasta un 30% de estudiantes de colegio informan haber sido intimidados en la sala de clases sin ningún tipo de intervención del profesor, y los alumnos reportan no buscar ayuda en la comunidad escolar, ya que creen que sus profesores no tomarán acciones, o bien, éstas no serán efectivas. (Reyes, 2011).

El triángulo del Bullying

Bullying es un fenómeno social en el cual, según hemos descrito anteriormente, intervienen variables psicológicas y sociales. Estas variables responden tanto al entorno socio-cultural que propicia la manifestación del fenómeno, como también a características particulares del agresor, la víctima y el grupo de testigos, quienes en conjunto generan condiciones facilitadoras para la aparición y recurrencia del fenómeno. A esta visión esquemática del problema la llamaremos “Triangulo del bullying” y dará cuenta de la interacción de 3 dimensiones en el fenómeno.

Esquematización del triángulo del Bullying[pic 3]

El agresor:

Desde la evaluación psiquiátrica, se suele encontrar en este grupo el diagnóstico de Trastorno Oposicionista Desafiante (TOD). Desde este trastorno y al persistir los desajustes sociales suelen aparecer conductas como el vandalismo, mal rendimiento académico, abuso de alcohol y, posteriormente, pueden llegar a presentar Trastorno de Conducta Disocial que hasta en un 40% terminan en procesos judiciales por actividad criminal (a los 24 años) según un estudio realizado en México por el Departamento de Salud Pública (Arroyave, 2011).

La víctima:

Los estudiantes conocidos como bully/víctimas, son los que en algunas ocasiones actúan como agresores y en otras como víctimas. Se caracterizan por su tendencia a combinar ansiedad y agresividad frente a la agresión, y a competir y generar tensión en el grupo. Cuando actúa como agresor, tiende a justificar su conducta. En sus actitudes suelen ser irritables, desafiantes y violentos (Arroyave, 2012).

En los bully/víctimas, se ha encontrado el mayor grupo de patologías mentales: Depresión, trastornos de ansiedad y Trastorno por Déficit de Atención c/ Hiperactividad de predominio impulsivo, con alta comorbilidad con Trastorno Oposicionista Desafiante. En este grupo de personas, se caracterizan el mal rendimiento académico, menor competitividad social, ser más impulsivos, es decir, devuelven el ataque y, al ser evaluados presentan baja autoestima y a largo plazo presentan mayor tendencia al uso de alcohol y cigarrillo. En el fenómeno de la agresión, se observa que suelen molestar a niños menores que ellos (Arroyave, 2012).

Con respecto a las víctimas de bullying, se observa que son inseguras, aisladas, poco asertivas, físicamente más débiles, con insuficientes habilidades sociales, escasos amigos, con familias sobreprotectoras y suelen ser percibidos como inseguros/ansiosos, y cuando son evaluados generalmente son diagnosticados con: Fobia Social, Depresión y Trastorno de Ansiedad (Arroyave, 2011).

Según Arroyave (2012), este tipo de estudiantes suele ser pasivo o sumiso, se comportan de manera ansiosa o sumisa frente a la agresión. Se caracterizan por no responder al ataque y sufrir en silencio. Cuando la agresión se repite, estas personas comienzan a presentar “victimización”, la cual se presenta con pérdida de la autoestima, disminución de la sensación de valor y alteración de la capacidad de confiar en otros. En su familia, cuando se conoce, el maltrato al hijo se vuelve el tema central y se presenta en los padres una sensación de impotencia para manejar la situación y en los hijos la sensación de falta de confianza en ellos mismos para manejar esta situación, por lo cual se sienten irritables y tristes a su vez (Arroyave, 2012).

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