DIFERENCIA ENTRE INVESTIGACIÓN CUALITATIVA E INVESTIGACIÓN CUANTITATIVA

En un lejano país del continente europeo vivía una familia formada por los padres y dos hermosas hijas llamadas Paula y Andrea, a quienes prodigaban todo su amor y educaban con buenos principios y valores, tratándolas por igual. Durante toda su infancia compartieron la misma habitación en la cual disfrutaban de sus juguetes y cometían toda clase de travesuras y aunque aparentemente parecían ser muy similares, los padres siempre notaban algunas diferencias en sus comportamientos y en sus gustos a la hora de tomar decisiones.

Siendo las dos niñas muy estudiosas y ordenadas, los profesores referían a sus padres sobre su comportamiento: a Paula le gustaba participar en clase intentando llegar al conocimiento mediante la comprensión y la empatía, poco le importaban las matemáticas, le gustaba mucho entrevistar a sus compañeras siempre buscando comprender sus conductas, permaneciendo en constante observación de cuanto la rodeaba intentando participar en las actividades.

A Andrea le interesaba muy poco compartir con sus compañeras, pero disfrutaba mucho su clase de matemáticas, siempre estaba contando, midiendo y haciendo uso del razonamiento abstracto, buscando las causas de los fenómenos sociales sin importarle mucho la subjetividad.

Pasó el tiempo y las niñas se convirtieron en dos hermosas adolescentes con personalidades totalmente opuestas. Cierto día cuando se encontraban haciendo los preparativos para la graduación como bachilleres cada una opinaba sobre lo quería estudiar en la universidad:

Yo quiero estudiar Psicología –decía Paula- ya que se deben realizar muchas entrevistas y estar en constante observación de los fenómenos sociales para conocer la conducta de las personas, hay que ser muy subjetivos para después realizar los análisis y desarrollar teorías explicativas de los diferentes comportamientos.

A mí por el contrario, me gustaría dedicarme a las matemáticas –comentaba Andrea- yo soy muy objetiva, quiero hacer investigaciones sistemáticas donde todo sea verificable mediante análisis estadísticos que comprueben la veracidad de lo que se está indagando, además al realizar las investigaciones en diferentes contextos tendré la oportunidad de comprobar empíricamente que una hipótesis es aplicable a varios conjuntos de datos y asimismo poder generalizar los resultados.

Las dos niñas ingresaron a la universidad y aunque compartían algunas clases afines para cada carrera, continuaban con sus métodos de investigación, razón por la cual siempre surgían algunas diferencias. Paula aseguraba que los sistemas no pueden ser determinados o explicados por las partes que los componen por sí solas, el sistema como un todo determina cómo se comportan las partes. Esta postura cualitativa la mantuvo durante sus estudios superiores, defendiéndola siempre ante su hermana.

Por su parte Andrea insistía en que la investigación era efectiva y contundente si su enfoque era cuantitativo y que sus datos fueran claros y estáticos, bien le decía a su hermana: el hecho de que esta metodología sea la más empleada no es producto del azar sino de la evolución del método científico a lo largo de los años. Es bien sabido que la cuantificación incrementa y facilita la comprensión del universo que nos rodea y ya mucho antes de los positivistas lógicos o neopositivistas, Galileo Galilei afirmaba en este sentido "mide lo que sea medible y haz medible lo que no lo sea".

Finalmente obtuvieron su pregrado, cada una con honores, pero debido a sus métodos de estudio sus vidas se fueron distanciando.

Fueron contratadas en diferentes empresas donde obtuvieron grandes logros, pero infortunadamente la crisis económica que golpeaba al país a pasos agigantados, llevó a la quiebra a las dos empresas y por consiguiente las dos hermanas entraron a formar parte de la fila de desempleados.

La única salida

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