El Prejuicio

PREJUICIO

Silvina Cohen

“Un prejuicio (del lat. praejudicium, ‘juzgado de antemano’) es el proceso de formación de un concepto o juicio sobre alguna cosa de forma anticipada, es decir, antes de tiempo; implica la elaboración de un juicio u opinión acerca de una persona o situación antes de determinar la preponderancia de la evidencia, o la elaboración de un juicio sin antes tener ninguna experiencia directa o real. Consiste en criticar de forma positiva o negativa una situación o una persona sin tener suficientes elementos previos. Es una actitud que puede observarse en todos los ámbitos y actividades de la sociedad, en cualquier grupo social y en cualquier grupo de edad, e implica una forma de pensar íntimamente relacionada con comportamientos o actitude

Qué importante tema para tratar para todo profesional que actúe en el ambito social.. Cuándo hablamos de nosotros mismos o escuchamos a otros, es habitual oirnos decir: Yo no soy prejuicioso. Pero en verdad, todos lo somos en una u otra medida. Y también es bueno saber que los prejuicios tienen que ver más con quien los porta (nosotros) que con aquellos que son nuestros “prejuzgados”.

Si pensamos en la etimología de la palabra “estereotipo”, devienen aquellas imágenes mentales, a forma de molde rígido, que nos hace ver a un grupo de gente que comparte ciertas características, sin variación alguna entre los miembros de ese mismo grupo (estereotipos positivos o negativos) Ideas, prejuicios, lo preconcebido e impuesto por el medio social y cultural, y que se aplican de forma general sobre un grupo de la misma nacionalidad, etnia, sexo etc. Y esto trae aparejado que podamos predecir comportamiento de esas personas sólo basándonos en prejuicios. Definí prejuicio anteriormente y agregaré que el prejuicio es un supuesto que no tiene sustento racional e incluso algunas veces, ni siquiera conocimiento previo. Es información imperfecta e incompleta sin base concisa y llega a nosotros y pasa por nosotros y llega a los otros por cultura y socialización, pueden ser dañinas, exageradas, y adquirir tal rigidez que cueste el cambio de actitud y el aprendizaje de quien prejuzga. Al prejuzgar basamos nuestra aceptación o rechazo a los otros por características sociales reales o imaginarias.

El prejuicio se compone de tres componentes: cognitivo, afectivo o comportamental. La acción del prejuicio negativo (que fue en el que más enfatizamos, el negativo de persona a personas) va desde hablar mal del otro, evitar el contacto, discriminarlo hasta el ataque físico o la exterminación. El prejuicio se relaciona con la discriminación y creo que hace bien revisar estos conceptos, porque es algo que convive con nosotros cotidianamente, desde los discursos de los medios, de un lado o del otro, hasta en nuestras casas, trabajos, o lugares de pertenencia en nuestros distintos roles.

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