El concepto de estrés como síndrome o conjunto de efectos inespecíficos reacciones fisiológicas del cuerpo de diferentes nocivos físicos o químicos agentes

ESTRÉS

En 1935, Hans Selye introdujo el concepto de estrés como síndrome o conjunto de reacciones fisiológicas no especificas del organismo frente a diferentes agentes nocivos, físicos o químicos. Todo evento es sinónimo de estrés, no interesa si es positivo o negativo: un casamiento, un nacimiento, la pérdida de empleo, etc.; es la preparación para un posible cambio que genera tensión física y mental; el individuo bajo presión activa un sistema que le advierte de la presencia de un factor estresor y lo prepara para enfrentar el cambio o el peligro, para pelear, escapar o paralizarlo. Este sistema hace que nos pongamos alerta; el corazón aumenta su frecuencia, se tensan los músculos, se transpira, se seca la boca, se reducen necesidades de ingerir alimentos, tiemblan las manos o quedamos inmovilizados. La respuesta del organismo es la de poner todos los órganos en situación de alerta para hacer frente a la situación potencialmente peligrosa

Ciertos pensamientos o impulsos pueden generar trastorno sicológico. Para mantenerse bajo control, los humanos apelamos a mecanismos de defensa u operaciones mentales que permiten minimizar los efectos de una situación que causa estrés y ayudan a que la persona mantenga su funcionamiento normal.

Es la respuesta del cuerpo a condiciones externas que perturban el equilibrio emocional, deseo de huir de la situación que lo provoca o confrontarla violentamente.

Causas: han cambiado enormemente a lo largo de la historia. La civilización ha creado nuevas presiones que ponen a prueba la capacidad de sobrevivir; a menudo las personas se enfrentan de manera continua con situaciones que excitan inconscientemente el organismo, acumulando energía que luego no se utiliza. La presión física puede acumularse y a la larga puede llevar al agotamiento y a la enfermedad. El estrés puede surgir de situaciones en el trabajo, en la casa, en las relaciones o puede ser el resultado de conflictos emotivos internos, de apuros económicos y de ciertas situaciones importantes en la vida del ser humano.

El estrés se acumula por: agresión, impaciencia, ira, ansiedad, miedo, alimentación poco saludable, tabaco, bebidas alcohólicas, drogas, partos, fallecimientos, matrimonio, divorcio, jubilación, cambio de empleo, etc. Para mejor comprensión, se dividen estas causas en:

Fisiológicas: relacionadas con enfermedades y lesiones del cuerpo que aumentan la tensión interior produciendo un nivel de estrés contraproducente. Por ejemplo, una enfermedad orgánica produce una reacción negativa en el campo emocional.

Sicológicas: vulnerabilidad emocional y cognitiva ante crisis vitales por: cambios evolutivos: infancia, adolescencia, madurez, vejez; relaciones interpersonales conflictivas o insuficientes; condiciones frustrantes de trabajo o estudio: excesiva exigencia o competitividad, monotonía,

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