Evaluación Universal

“México necesita definir claramente los estándares para que la profesión y la sociedad sepan cuáles son los conocimientos, las habilidades y los valores centrales asociados a una enseñanza eficaz” (OCDE, 2010).

Antecedentes a la Evaluación Universal

A diferencia de otros países, en donde los primeros años de servicio docente son un periodo de prueba durante el cual se evalúa si un maestro tiene o no las competencias y conocimientos necesarios para permanecer en el sistema educativo, en México la permanencia de un maestro se vuelve vitalicia una vez que transcurren seis meses a partir de su contratación como personal de base.

Por un lado, esto implica que un maestro a pesar de tener un bajo desempeño, puede mantener su plaza; y por otro, se anula la posibilidad de establecer mecanismos de rendición de cuentas y de corrección de problemas, lo que termina traduciéndose en la vulneración del derecho a una educación de calidad.

Durante el desarrollo del Sistema Educativo Nacional de México se han creado diversos programas e instrumentos que han buscado impulsar determinadas competencias docentes en función del momento de la carrera docente, y que a su vez, éstos vayan de la mano con el sistema de estímulos de la carrera magisterial. Un problema medular en este asunto es que los diversos programas de carrera magisterial no han estado integrados a un sistema coherente, ni han contado con los estándares de calidad adecuados. Ello ha trajo como consecuencia la reproducción de prácticas clientelares y corruptas.

El gobierno mexicano ha buscado mejorar esta situación ya desde hace algunos años. La primera propuesta que se presentó fue el Programa Sectorial de Educación 2007-2012., una de las fallas de esta propuesta es que no contaba con ningún indicador sobre el desempeño docente.

En mayo de 2008, el tema de los estándares docentes y la evaluación magisterial ganó importancia con el acuerdo Alianza por la Calidad de la Educación (ACE). La formalización de la Alianza incluyó el compromiso de establecer un sistema de “evaluación exhaustivo y periódico de todos los actores del proceso educativo”. En este acuerdo, también se comprometieron a reformar los lineamientos de la Carrera Magisterial para que únicamente se consideraran tres factores para ingresar al programa o subir de nivel de estímulos: aprovechamiento escolar, cursos de actualización y desempeño profesional.

En mayo de 2011, el Presidente de la República, Felipe Calderón anunció un nuevo acuerdo con el Sindicado Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) para modificar el principal programa de estímulos docentes del país y para crear un Sistema Universal de Evaluación Docente. A través de esta iniciativa se pudieron delinear los estándares que promueven la calidad educativa, especialmente a través de evaluaciones formativas destinadas a mejorar

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