LA NARRACIÓN Y SU TECNICA

LA NARRACIÓN Y SU TECNICA.

A través de la narración se tiene la posibilidad de relatar sucesos que son significativos para la vida profesional.

En este presente escrito se menciona que la narración obedece a unos cuantos principios formales y depende de ciertas reglas psicológicas, las cuales tendrán que adaptarse al tema.

El hecho de narrar es algo tan personal que escapa de toda didáctica.

Se dice que el habla corriente y popular, es casi del todo una narración.

Existen ciertas personas que espontáneamente como impulso natural se pasan la vida narrando, nos cuentan algo que lo hacen con tal viveza que nos parece que estamos viendo lo que nos narran.

Narrar es contar una o varias acciones. La narración es una escena compleja y, también un encadenamiento de escenas. La diferencia fundamental entre descripción y narración reside, esencialmente, en el juego de un factor que se resume en dos palabras: vida interior.

Hanlet se contenta con fijar el aspecto externo de los hechos percibidos por nuestros sentidos, la narración intenta averiguar o conocer, además de las acciones, sus causas morales; los sentimientos, el carácter, en suma, que impulsa a actuar a los personajes en un sentido determinado.

Es lógico que en toda narración hay también descripción.

Por tonto se puede aplicar la técnica descriptiva, que se refiere a la observación y selección.

El que narra debe excitar el interés, recalca Schoeckel.

Según Hanlet, la unidad

y el movimiento son las leyes fundamentales de la narración, señala dos puntos:

1) La unidad de la narración se consigue con la búsqueda del punto de vista, es decir, el centro de interés de las ideas y de los hechos.

2) La narración no es una construcción fija, sino algo que se mueve, que camina, que se desarrolla y transforma.

La ley del interés es descubrir que lleva a la curiosidad, para despertar la curiosidad del lector es preciso que halle novedad.

Lo nuevo es lo fuerte, lo vigoroso, es el enfoque personal sincero y original de un hecho o de una idea.

“La narración viva y verdadera saca su interés su movimiento, de la realidad, es decir, del recuerdo de unos hechos directamente observados es la ley de la verdad”, lo menciona Hanlet.

No quiere decir que la narración sea una copia exacta de la realidad, sino más bien es la interpretación personal al punto de vista propia.

Narrar es evocar lo conocido, aquello de que tenemos experiencia propia.

Lo verosímil en esencia, es lo que impresiona por su verdad aunque no haya sucedido nunca.

La exposición debe ser lo más rápida posible; abreviar los preliminares, ir derecho al grano, entrar rápidamente en materia, sacrificar lo inútil y desdeñar los preámbulos. Procurar la sencillez, no inflar el tono, no prometer demasiado.

La narración es preferida a la descripción y muchas veces, ella sola forma un cuadro.

Licenciatura en Educación

Griselda Romero Vargas.

Escolar Primaria.

El dialogo educativo presenta un carácter asimétrico, un movimiento dialectico nacido no de un enfrentamiento, sino de una investigación nutrida del choque de ideas contrarias. Dicho dialogo tiene una finalidad y está orientado, Sócrates percibe: solo él conoce el significado del dialogo. El carácter asimétrico del dialogo educativo es inherente a la situación.

La patología del dialogo se puede resumir en dos esquemas:

1. La función y el fin están mal asumidos.

2. Se complace en los rigores de su rol que debería desempeñar en la estricta medida de la necesidad del otro.

En el dialogo, el educador necesita centrarse en el niño o el adolescente, aceptando las limitaciones de su propia posición. El error del educador sería negarse a asumir su función o desnaturalizarla por exceso de poder o prolongarla cuando ya no es útil. El segundo caso de la asimetría del dialogo educativo proviene de la dimensión temporal.

El dialogo constructivo reviste formas diversificadas según los niveles de conocimiento, según la naturaleza del mensaje, el género de tratamiento

de la información que el alumno puede aplicar.

Cuando el enseñante se centra en el grupo de clase, crea las condiciones favorables a un aprendizaje, por que los alumnos desarrollan su necesidad de aceptar a los demás, de confirmar sus recursos, de compartir responsabilidades y asumir roles.

La transacción educativa tal como nos la presenta Bradford, se aproxima al sentido etimológico de la palabra permitiendo llegar a buen fin una operación, el aprendizaje del alumno. La transacción es pues un fenómeno social que resulta de intercambios, tiene por objetivo establecer las obligaciones respectivas de los interlocutores, de fijar la regla del juego en la situación creada por un aprendizaje de grupo.

En el dialogo asimétrico supondrían un progreso paralelo es decir en la elaboración

de un conocimiento simultaneo de etapas.

“Sócrates encamina a su interlocutor hacia una verdad que èl, Sócrates, percibe: sòlo

el conoce el significado del dialogo.”esto es con el fin de ponerse en el lugar de

el interlocutor para comprender mejor. El carácter asimétrico del dialogo educativo

es

el que se proporciona en una conversación esto es el encuentro de de sujetos

que se escuchan entre si “A grandes rasgos se puede resumir en dos esquemas

la patología del dialogo asimétrica en nuestra época los padres inmaduros, mae-

stros Incompetentes están abrumados por las tareas y reaccionan con la negligencia

la, ineficacia agresiva o desordenada.”

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