ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Madurez. ASPECTOS DE LA MADUREZ

Ramiro LedesmaResumen21 de Octubre de 2017

3.236 Palabras (13 Páginas)302 Visitas

Página 1 de 13

LA MADUREZ

Las señales y los sentimientos que guardan relación con la madurez son una cosa; su significado para el desarrollo de la personalidad es otro.

Se la utiliza en el titulo de este libro como sustantivo que describe un periodo al que con frecuencia suele de denominarse “adultez”.

ASPECTOS DE LA MADUREZ

El estudio sobre los veteranos de Vietnam:

La mayoría de estos hombres se ven a sí mismos como profesionales y se sienten orgullosos de su habilidad de adaptarse a ambientes cambiantes y a exigencias variadas de desempeño. Son obviamente adultos que están comprometidos con cierto estilo de vida, que han desarrollado estructuras de personalidad dura y resistentes, apropiadas para la adaptación de la guerra. Pero sus observaciones críticas se asemejan a meras puntualizaciones de hechos, dan la impresión de carecer de contenido emocional.

        Por su capacidad de absorber experiencias de gran tensión y que golpean fuertemente la integridad de la persona, las personalidades de los hombres de nuestra encuesta por muestreo son como papel secante. Los hombres de más edad tienen una capa defensiva que puede absorber casi cualquier cosa. Los más jóvenes tienen un  punto de saturación mucho más bajo; cuando se lo alcanza, lo único que pueden hacer es tratar de recoger lo que rebasa recurriendo a mecanismos improvisados de adaptación.

        La edad y la experiencia tornarán más duras a las personas porque éstas desarrollan mecanismos de adaptación que son apropiados a sus situaciones adultas. A lo largo de los años, para proteger al sí mismo o al yo contra los asaltos de las experiencias difíciles, van tornándose habituales ciertas técnicas que ayudan a superarlas.  

        Por lo común, la tendencia a utilizar técnicas defensivas parece efectivamente hacerse más fuerte durante la madurez- hay por lo general mas contra lo cual defenderse-. Pero esta capacidad de defensa psicología de la que estamos hablando no es, en y por si misma, una prueba de insensibilidad. Es posible inclusive dar vuelta toda la cuestión sosteniendo que la gente realmente dura no necesitara utilizar técnicas defensivas tanto como la que realmente es sensible; por lo cual, cuanto más defensivo sea el individuo, más sensible será.

No obstante, volvamos a nuestra cuestión principal: la apariencia general de dueraza o insensibilidad que parece sobrevenir con la madurez. Hemos visto cuan llamativo puede ser este aspecto cuando se lo observa en grupos de soldados de diferente edad. Las condiciones amenazadoras que producen este fenómeno pueden encontrarse también en otros dominios de la vida.

Los estudios sobre el mundo de los negocios

Una encuesta efectuada mediante entrevistas por Johnson indicaba que los ascensos, en las empresas dependen en gran medida de las “intrigas de los ejecutivos”; uno se adelanta eliminando al hombre que se halla en un puesto más alto y/o sacando del medio a los demás que aspiran a sucederlo.

Casi sin excepción, las personas que entrevistamos lamentaban la parte prominente que el juego sucio desempeña en la estructura de poder de una compañía.

Además, según Johnson, las organizaciones comerciales permiten que continúe todo este juego sucio porque proporciona un modo de seleccionar a los hombres que reúnen las condiciones que la firma precisa.

Whyte dice que si bien es cierto que los hombres que ocupan los escalones mas bajos de las grandes compañías están muy alejados de las competencias de los que aspiran a los puestos más altos, a pesar de ello compiten.

Hemos pintado una imagen bastante triste de las condiciones con que se enfrentan los adultos en el mundo de los negocios, porque son tristes. Al tratar de describir este mundo, que establece para muchas personas el tono de la madurez, solo hemos encontrado dos tipos de materiales: los que ignoran los aspectos negativos del proceso personal, y los que los expresan como acabamos de indicarlo.

Desde el punto de vista psicológico, no obstante, podemos reducir el efecto negativo de estas consideraciones, mediante el recurso de agregarles la siguiente: aparte de la satisfacción que los hombres obtienen haciendo dinero, una de las racionalizaciones favoritas- la de las cosas no son mucho mejores en otras áreas de la vida adulta- encierra en sí mucha verdad.

Otras áreas

Consideremos en primer lugar el mundo académico. Mary McCarthy escribió después una novela critica sobre los aspectos competitivos e hipócritas de la vida de los docentes.

Consideremos si no, el deporte. Jerry Kramer nos transmite algunas de las duras realidades que contaminan la vida de un atleta exitoso.

O consideremos el arte. Los datos recogidos a partir de entrevistas efectuadas a ejecutantes de música pop alrededor de 1960, muestran la eterna lucha entre la integridad y la actitud comercial.

No obstante, el propósito que hemos tenido al examinar estos puntos, ha sido en parte el de indicar el tipo de tensión psicológica que implican, y en parte destacar un aspecto importante de la vida adulta que con frecuencia se ignora en las obras populares de psicología.

Como la mayoría de las personas tropieza con estas condiciones al asumir sus roles adultos, comienzan por lo general a responder a esas realidades utilizando cada vez mas sus mecanismos de defensa, e inevitablemente parecen más insensibles a medida que van acumulándose las cicatrices psicológicas.

Nada de todo esto debería confundirse con la desilusión que acompaña la transición de la madurez. La diferencia esencial que vemos entre la transición a la adultez y la madurez es esta: en el primero de estos periodos, uno pierde las ilusiones; en el segundo, se aprende a vivir sin ellas.

En resumen, si la transición a la adultez constituye una serie de dramáticos encuentros con experiencias desilusionantes y decisiones inciertas, la madurez parece una situación menos dramática de desgaste.

El matrimonio

        Muchos son los materiales que indican que los aspectos dramáticos que asume el matrimonio durante la transición a la adultez dejan lugar después al desgaste. Consideremos a este respecto la investigación de Pineo, quien informo que después de los cinco primero años de matrimonio se produce una disminución general de la satisfacción y la adaptación mutuas. Especifica, que declina la intimidad física, la pareja comparte menos intereses y actividades, y son mas quienes mencionan que se sienten solos. Pineo interpreto estos datos de acuerdo con una teoría del “desencanto matrimonial”.

        A nivel mas general, se producen cambios inevitables en la relación matrimonial a medida que maridos y esposas can siendo captados por sus mundos privados determinados por la necesidad de ganarse la vida y de criar a su familia.

        Cuando se lo reconsidera en su conjunto, el material del matrimonio sugiere que si bien al comienzo puede o no ser un lecho de rosas, en su madurez las parejas comienzan a sentir algunas espinas. Ya se apele a teorías como la del desencanto matrimonial o a las fuentes cotidianas de tensión domesticas, en cualquier caso parece muy claro el desgaste que se experimenta en el matrimonio.

La amistad

        La dificultad reside en que tanto para los hombres como para las mujeres, esas relaciones no calan muy hondo. Las lealtades primarias que se centran en la familia y las preocupaciones siempre presentes por el progreso material o por el éxito individual tienden a impedir la formación de amistades íntimas.

        Cuando examinan las diferencias existentes entre las amistades formadas durante la adolescencia y las que se establecen en la madurez.

        La intimidad con otro pone en peligro las represiones de impulsos y afectos. La amistad de los adultos no es más que una mutua huida del aburrimiento. En muchos casos la amistad se centra en un juego con el sobreentendido de que todo aquello que no guarde relación con el juego constituye una impertinencia, es algo embarazoso o que rebasa los límites admitidos.

Resumen de las condiciones de la madurez

        Las personas parecen tornarse más duras e insensibles a medida que se ven obligadas a responder a las amenazas que desde todas partes se plantean contra sus conceptos de sí mismos. Si los diversos materiales citados se los acepta tal como se los propone, entonces el desarrollo de la personalidad durante la madurez no será más que un esfuerzo por mantener posiciones. Esto es, será preciso reconocer que las condiciones de la adultez fuerzan a las personas a adoptar una postura psicológicamente defensiva que impedirá mayores desarrollos.

        E indudablemente existen muchas otras fuentes de satisfacción durante la madurez. Las situaciones competitivas de trabajo imponen tensiones graves, mas proporcionan posibilidades estimulantes de éxito. De modo semejante, existen en el matrimonio las tensiones y el desgaste, pero en alguna forma profunda sobreviven el afecto y el respeto mutuo, y la relación puede ser aun mas fuerte tras haber pasado las pruebas que traen los años.

        Parece conveniente resumir nuestra introducción a la madurez mediante tres generalizaciones. En primer lugar , las condiciones existentes en este periodo son tales que, al enfrentarlas, parecería que los adultos van tornándose más duros, menos sensibles, menos abiertos al cambio. En segundo lugar, a pesar de los aspectos más negros de la vida adulta, la madurez no carece de compensaciones o satisfacciones. Y en tercer lugar, sin que esto implique contradecir la imagen general de desgaste durante la madurez, conviene tener en cuenta que la investigación no ha hecho mas que arañar apenas la superficie de este periodo. Nadie puede escribir sobre  posibilidades de cambio y crecimiento que están todavía por investigarse.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (19 Kb) pdf (165 Kb) docx (16 Kb)
Leer 12 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com