La Psicología Como Ciencia
theblackgabriel26 de Febrero de 2015
674 Palabras (3 Páginas)338 Visitas
Anteriormente definimos a la psicología como la ciencia de la conducta y los procesos
mentales. La palabra clave en esta definición es ciencia. Los psicólogos confían en el
método científico cuando tratan de responder preguntas. Obtienen datos a partir de
la observación cuidadosa y sistemática; desarrollan teorías que intentan explicar lo que
han observado; hacen nuevas predicciones basadas en esas teorías y luego prueban sistemáticamente
tales predicciones a través de observaciones adicionales y experimentos
para determinar si son correctas. De esta forma, al igual que todos los científicos, los
psicólogos usan el método científico para describir, entender, predecir y, a la larga, obtener
cierto grado de control sobre lo que estudian. (El método científico no sólo es para
científicos; vea Aplicación de la psicología; Pensamiento crítico: Un beneficio adicional de estudiar
psicología.)
Por ejemplo, considere el tema de los varones, las mujeres y la agresión. Muchas
personas creen que los varones son naturalmente más agresivos que las mujeres. Otras
afirman que los niños aprenden a ser agresivos porque nuestra sociedad y cultura los
alienta —y de hecho les exige— a ser combativos e incluso violentos. ¿Cómo abordarían
los psicólogos este tema? En primer lugar, tratarían de averiguar si los hombres y
las mujeres en realidad difieren en la conducta agresiva. Varias investigaciones han
abordado esta cuestión y la evidencia parece concluyente: los varones son más agresivos
que las mujeres, sobre todo cuando hablamos de agresión física (Knight, Fabes y Higgins,
1996; Wright, 1994). Es posible que las niñas y las mujeres hagan comentarios
desagradables o griten, pero es mucho más probable que los niños y los hombres peleen.
Luego de establecer que existen diferencias sexuales en la agresión física y de haber
descrito esas diferencias, el siguiente paso es explicarlas. Varias explicaciones son posibles.
Los psicofisiólogos probablemente atribuirían esas diferencias a la genética o la
química corporal; los psicólogos del desarrollo pueden considerar las formas en que se
enseña a un niño a comportarse “como un varón” o “como una niña”; y los psicólogos
sociales pueden explicar las diferencias en términos de normas culturales, las cuales
requieren que los varones “se defiendan solos” y enseñan que la agresión física no es
“femenina”.
Cada una de esas explicaciones se presenta como una teoría acerca de las causas de
las diferencias sexuales en la agresión; cada una intenta extraer unos cuantos principios
a partir de un gran número de hechos. Y cada teoría nos permite generar nuevas hipótesis,
o predicciones, acerca del fenómeno en cuestión. Si las diferencias de género en
la agresión se deben a que los hombres tienen niveles más altos de testosterona que las
mujeres, entonces podríamos predecir que los hombres extremadamente violentos deben
tener niveles más altos de testosterona que los hombres que por lo general no son violentos. Si las diferencias sexuales en la agresión surgen de la educación temprana,
entonces podríamos predecir que deben existir menos diferencias sexuales en la agresión
en las familias donde los padres no enfatizan las diferencias de género. Por último, si
las diferencias sexuales en la agresión reflejan normas culturales, entonces podríamos
predecir que las diferencias deberían ser pequeñas en las sociedades que no prohíben
que las niñas y las mujeres peleen o en las que consideran que la agresión física es anormal
e inadecuada para ambos sexos.
...