La ética Del Arquitecto

EL ARQUITECTO Y LA ÉTICA PROFESIONAL

La comisión de ética fue integrada con objeto de analizar el papel de la arquitectura y del arquitecto como profesional, en relación a sus propias responsabilidades y a su actuación en la presentación de servicios profesionales, así como de la actividad comercial, para establecer sus derechos y obligaciones dentro de su área de competencia, haciendo las recomendaciones pertinentes para su aplicación en diferentes ámbitos gremiales y académicos. El problema de la ética en el ejercicio profesional de deberá enfrentar partiendo de principios morales, ya que la práctica de la ética es la resultante de una manera de ser permanente. La arquitectura también se considera una vocación porque es una posibilidad de ser, es un sentido de orientación vital, marca su propio novel de excelencia. Cuando una persona va elegir una profesión, uno puede decidir entre múltiples maneras de ser, y es adquirir un compromiso de ser hombre excelente dentro de su campo de profesión. El profesionista debe ajustarse a los valores éticos y los estándares más elevados, para no caer.

La finalidad principal de un ejercicio profesional es el prestar un servicio a la sociedad principalmente, es realizar bien tu papel y realizar un bien para alguien más conociendo sus necesidades, ya algo secundario serán los satisfactores económicos que puedas obtener con esto para ti y tu familia. Cualquier profesión debe de promover la conciencia de la responsabilidad y solidaridad social. Todas las profesiones requieren de obligaciones y deberes, y nuestro comportamiento hacia estos y la manera en lo que los afrontemos será la conciencia profesional. Arquitectura es la profesión que se dedica a la profesión de los espacios, que satisfagan la necesidad de su cliente, crean obras bellas, las adecuan ecológicamente al momento, al espacio, al lugar; lo hacen funcional, construible sólidamente, y los acabados adecuados, y a la vez siendo realizados dentro del costo y el tiempo planeados, sus espacios deben proporcionar bienestar, y para todo esto es necesario tener conocimientos técnicos y se deben complementar con valores éticos.

La ética es un resultado de la congruencia y la relación entre la manera de pensar de las personas y la manera en la que realizamos las cosas, esto permite que nos desarrollemos de una manera más cordial y armónica, pues el ser arquitecto también exige derechos y obligaciones. El arquitecto tiene una relación con el hombre, habiendo adquirido una obligación por razón de su vocación debiendo estar en condición de proponer soluciones adecuadas de todo tipo para una construcción. Dentro de la prestación de los servicios profesionales se presentaran una seria de problemas que dependerán para su solución de la habilidad que cada arquitecto tenga para resolverlos, pues deberá recurrir a los valores que lo han formado como persona. La sociedad de consumo en la que vivimos hoy en día lleva al arquitecto muchos veces a desarrollar actividades complementarias que lo alejan de su profesión en sí, y lo obligan a tomar riesgos, así mismo el arquitecto deja de actuar como un prestador de servicios y se convierte en un comerciante, lo cual no está permitido.

El arquitecto para el desarrollo de su profesión encuentra dos sectores sociales: El sector informal en el que no se contratan los servicios del arquitecto, y el formal en el que se requiere del mismo en 2 modalidades; el de prestador de servicios y en el ámbito comercial. La definición de valores dentro de la profesión no determina la manera de ser de un profesionista, se espera que el arquitecto tenga los siguientes valores: Que sea comprometido: Sabiendo las necesidades de su cliente y respondiendo a ellas, sabiendo que es una profesión de servicio para la cual debe poner toda su capacidad.

Que sea confiable: Que emita juicios confiables hacia su cliente

Que sea Congruente: que sus ideas sean conscientes para su realización

Que sea discreto: Tiene la obligación de guardar discreción a la información directa o indirecta que pueda recibir.

Que sea honesto: Que le hable claramente al cliente y haga todos los tramites lo más transparente posibles

Que sea Honrado: Debe de mostrar rectitud en sus actos no presentando dudas.

Que sea Justo: Que trabaje con justicia, pagando lo adecuado por cada caso.

Que sea leal: Que tenga solidaridad con los intereses de su cliente.

Que sea prudente: Que sea prudente en sus relaciones con las demás personas cuidando lo que dice.

Que sea responsable: Asumiendo consecuencias de decisiones y cumpliendo.

Que sea veraz: Buscando siempre la verdad.

El arquitecto podrá ser contratado por diferentes tipos:

Contratación de obra por administración: El cliente paga los costos o gastos directos o indirectos

Contratación de obra por precios unitarios: El constructor solo cotiza y se le paga el producto del precio por la unidad.

Contratación de obra aprecio alzado: El constructor contrata por un valor total la obra a ejecutar y absorbe todas las variaciones de precio de los materiales.

Contratación por llave en mano: Se le encarga al constructor la obtención de los permisos de construcción y la ejecución total de la obra incluyendo el montaje de los equipos y mobiliarios necesarios.

El arquitecto debe cumplir con su cliente una serie de deberes de tipo ético que fundamentalmente se dividen en tres: En el desarrollo del proyecto y en la prestación de diversos servicios.

Así mismo el arquitecto cuenta con deberes hacia sus trabajadores y empleados: Se debe preocupar por el desarrollo y el crecimiento de sus empleados y trabajadores, debe dotarlos de elementos necesarios que les permitan desarrollarse adecuadamente en su trabajo, y a su vez debe de crear un ambiente agradable de trabajo de armonía y respeto.

El arquitecto también tiene deberes con su comunidad como el de respetar el contexto urbano, y comprometerse con el apoyo y el desarrollo de su ciudad.

Tiene deberes con su gremio: Como el de mostrar respeto y solidaridad para mostrar sus intereses, promoviendo la unidad entre sus colegas.

También tiene deberes en el campo comercial, con sus trabajadores y sus personales, con sus proveedores y contratistas, pues debe de

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