Pelicula: Un Niño Muy Especial

Ensayo de la película: “UN NIÑO MUY ESPECIAL”

UN MUNDO DIFICIL DE COMPRENDER

En cualquier lugar del planeta es muy fácil encontrar casos de incomprensión hacia uno o varios individuos, cuando actúan de una manera diferente que desconcierta y confunde a las demás personas, al no tener un conocimiento exacto o no ser capaces de admitir el problema por el que puede estar pasando él o ellos y las causas de su comportamiento.

En la película “un niño muy especial” se evidencia una experiencia en este mismo sentido, se trata de un pequeño que tiene una forma diferente de ver el mundo, él se deja llevar por sus emociones y su particular forma de ser, sin pensar en las consecuencias de sus actos, que aunque para él son normales, para sus padres, profesores y compañeros es una manera inusual o “anormal” de comportamiento, ya que por ejemplo, se siente muy atraído por recorrer y conocer la ciudad en la que vive y se podría decir que ésto no tiene nada de malo o extraño, pero el punto está en que lo hace solito y en horas en las cuales debería estar en el colegio, ausentándose así de sus clases, y en otras ocasiones asiste, pero es casi como si no lo hiciera, porque gracias a su increíble imaginación y a su capacidad y gusto por la pintura, se adentra en mundos de paisajes, colores y fantasías, que lo alejan de las explicaciones de sus maestros y al “aterrizar” a la realidad, no tiene la menor idea de lo que paso en el aula, por esta razón el niño es castigado y tachado de “bruto” .

Este niño no logra concentrarse en sus clases, ya que se le dificulta entender lo que el maestro dice y lo que escribe en el tablero o en los cuadernos, lo mismo le sucede al leer un libro, por ejemplo, porque ve cómo las letras no se quedan quietas, es algo muy extraño (para quien no tiene conocimiento del tema) él confunde las letras, lee y escribe las palabras al revés, no identifica los números ni las operaciones matemáticas, tiene serios problemas con estas y otras situaciones que para el resto de los niños son muy fáciles realizar, y por esta razón, además de sentir la incomprensión de las demás personas, se siente muy mal emocionalmente, porque nada de lo que hace satisface a sus padres y maestros. A raíz de todo esto, Su padre decide llevarlo a un internado, porque piensa que es un problema de indisciplina y aquí el niño se siente aún más aislado y comienza a perder el interés por lo único que pude realizar correctamente: la pintura y solo logra relacionarse con otro estudiante en condición de discapacidad que le brinda su amistad.

Cualquier persona, maestro o familiar de un niño que se comporta de una manera diferente, daría su apreciación del hecho de la manera más sencilla: clasificándolo como un caso de hiperactividad, esa es su impresión, acertada o no, no debemos juzgarlas, ya que no todos somos especialistas, pediatras o psicólogos capaces de identificar estos problemas y actuar sobre ellos, porque pueden haber situaciones en las cuales haya muchas personas que cuentan con los conocimientos necesarios para saber que no todas las veces se trata de simples “niños hiperactivos” y sin embargo no hacer nada al respecto , pero también se necesita comprensión, pues a un ser humano con un poquito de sensibilidad esta historia le parecerá una injusticia contra un pequeño que necesita ayuda para enfrentar este problema.

Todo este panorama es muy desalentador para este pequeño, el no contar con el apoyo y la comprensión de sus seres queridos le hace caer aún más en su problema; hasta que a la institución donde estudia llega un nuevo maestro de artes, quien es el único que se interesa verdaderamente por su bienestar y logra descubrir lo que le está pasando; pero si se dijo que no es hiperactividad, entonces ¿Cuál es el tan nombrado problema? , según el comportamiento y las dificultades

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