Aspirar a la sabiduria

ASPIRAR A LA SABIDURÍA Y EL CONOCIEMIENTO PARA CONTRUIR UN PAIS MEJOR

“Para adquirir una educación, tiene más influencia el deseo personal que la institución académica a la que se asista y es más motivadora la fe que la capacidad que se posea” (Rusell, 1992). Las personas constantemente hablan acerca de lo importante que es la educación, sin embargo, este es solo un componente de la sabiduría, esta va más allá, pues la sabiduría comprende además una dimensión más allá de la realidad, según la cual es necesario el conocimiento de Dios y tener fe en nosotros mismo. Los elementos de la sabiduría según Villa (2010) abarcan:

Consejo, que es la ayuda que el Señor nos da para escoger lo que más nos conviene. Piedad, que es un amor filial a Dios y a gustar de todo lo que nos lleva a Él. Entendimiento, es la facilidad que el Señor nos da para comprender, las lecturas espirituales, las predicaciones de los sacerdotes, los buenos consejos, etc. La bondad, la paciencia, la alegría, sin vulgaridad, el gozo, la fidelidad, no sólo en el matrimonio, sino en todas nuestras obras para que sean limpias y transparentes. Paz para llevarla a los demás. No hay mayor felicidad que la paz interior, y por eso es tan importante una buena confesión. Humildad, hay que pedirla mucho para no vanagloriarnos de nada, sino que entendamos que es Dios quien actúa a través de nosotros, y para derrotar la soberbia que nos bloquea tanto la acción del Señor en nosotros. Dominio de sí mismo o templanza, que nos ayuda a decir NO cuando vamos a hacer algo contra la moral. Benignidad para ser generosos con el prójimo. Y Castidad de pensamiento.

Continuando con el tema, los principios religiosos que rigen a la universidad y algunos (si es que no son todos) de los elementos anteriormente citados, la misión que tiene la Universidad Javeriana en sus estudiantes es la de formar hombres y mujeres que utilicen su conocimiento y sabiduría para ponerse al servicio de la sociedad y así poder librarla de la ignorancia. Nos dice Arango Horacio S.J. (1998) que, para lograr cumplir este ideal es necesario entonces plantear tres puntos de partida: el primero, tener una comprensión profunda de la realidad social y política; el segundo, elaborar un proyecto de humanidad; y el tercero, redescubrir la tarea educativa y de las mediaciones del saber.

Para el primer punto la universidad cuenta con todo un arsenal de investigaciones, programas de extensión, interacción con otras universidades, etc. Con ese conocimiento ya se podría plantear entonces el proyecto del que habla el segundo punto, un proyecto de humanidad que pueda ser aplicado en Colombia, adaptado al tipo de humanidad que prevalece hoy en día en la sociedad colombiana, para que así se ajuste a la transformación de las costumbres y crear un conocimiento “articulado y coherente” de toda la realidad del país, además dentro de aquel se deberá tener en cuenta a todos los colombianos, para que así hasta quienes son frecuentemente ignorados por todos los poderes lleven también consigo procesos de construcción social. El tercer punto, que son las mediaciones del saber, debe contemplar la interacción y colaboración entre todos los involucrados en los anteriores puntos, para que así todos los conocimientos puedan ser llevados a convertirse en estrategias para el avance del saber.

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