Conversiones

Introducción:

Si bien es cierto que la Biblia asegura y enfatiza que la salvación es un don de Dios, no es menos cierto que todo creyente debería tener un entendimiento cabal de cómo se llevó acabo esa salvación, muchas veces cuando uno le pregunta a una persona que dice ser cristiana, como sabe que es salvo o de qué forma ha sido salva, no tiene respuestas claras o no tiene idea alguna de cómo ha sido posible que recibiera ese regalo magnifico otorgado por la gracia soberana de Dios el cual llamamos: salvación.

Como y porque soy salvo nos ayuda mucho a formar una visión enteramente bíblica de nuestra salvación y será tan importante que nos ayudara considerablemente en nuestro caminar en esta nueva vida o en este nuevo comienzo.

Muchos de los conceptos o creencias que se enseñan en torno a la salvación lamentablemente no son más que métodos que el hombre ha creado según el lente denominacional de su preferencia y eso sin duda afecta en gran manera a las personas que siguen o creen esas doctrinas. Por eso tener una comprensión y entendimiento claro de lo que significa “el evangelio” es vital y de suma importancia. Todos sabemos o por lo menos hemos oído la palabra evangelio, pero es probable que no tengamos un entendimiento adecuado de lo que significa esa palabra y de donde viene su origen

Objetivos:

Objetivo general:

Diseñar herramientas didácticas de comunicación dirigidas al segmento infantil enfocadas a evangelizar niños de escasos recursos.

Objetivos específicos:

 Elaborar juegos lúdicos para niños entre las edades de 6 a 12 años.

 Crear conciencia sobre la salvación en niños.

 Enseñar a los niños de manera fácil y divertida más sobre la biblia.

La salvación

¿Qué es la Salvación?

La salvación es un término que genéricamente se refiere a la liberación de un estado o condición indeseable.

¿Qué es la doctrina cristiana de la salvación?

La salvación es la liberación de un peligro o un sufrimiento. Salvar es liberar o proteger. La palabra contiene la idea de victoria, salud, o preservación. Algunas veces, la Biblia usa las palabras “salvo” o “salvación” para referirse a algo temporal, liberación física, como la liberación de Pablo de la prisión (Filipenses 1:19).

Filipenses 1:19: Porque sé que por vuestra oración y la suministración del Espíritu de Jesucristo, este resultara en mi salvación.

Con más frecuencia, la palabra salvación se refiere a una eterna liberación espiritual. Cuando Pablo le dijo al carcelero de Filipos lo que debía hacer para ser salvo, él se estaba refiriendo al destino eterno del carcelero (Hechos 16:30-31). Jesús iguala el ser salvo con la entrada al reino de Dios (Mateo 19:24-25).

Hechos 16: 30 – 31: y sacándolos, les dijo: Señores ¿Qué debo hacer para ser salvos? 31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.

Mateo 19: 24 – 26: Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. 25 Sus discípulos, oyendo esto, se asombraros en gran manera, diciendo: ¿Quiénes, pues, podrá ser salvo? 26 Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible; más para Dios todo es posible.

¿De qué somos salvados?

En la doctrina cristiana de la salvación, somos salvados de la “ira”; esto es, del juicio de Dios al pecado (Romanos 5:9; 1 Tesalonicenses 5:9). Nuestro pecado nos ha separado de Dios, y la consecuencia el pecado es la muerte (Romanos 6:23). La salvación bíblica se refiere a nuestra liberación de las consecuencias del pecado, y por lo tanto, implica la remisión del pecado.

Romanos 5:9: pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por el seremos salvos de la ira.

Romanos 6:23: porque la paga del pecado es muerte, más la dadiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

1 Tesalonicenses 5:9: Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo.

¿Quién realiza la salvación?

Sólo Dios puede quitar el pecado y liberarnos del pago del pecado (2 Timoteo 1:9; Tito 3:5).

Timoteo 1:9: quien nos salvó y llamo con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyos y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos.

Tito 3:5: nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Estudio Santo.

¿Cómo salva Dios?

En la doctrina cristiana de la salvación, Dios nos ha rescatado a través de Cristo (Juan 3:17). Específicamente, fue la muerte de Jesús en la cruz y Su subsiguiente resurrección lo que logró nuestra salvación (Romanos 5:10; Efesios 1:7). La Escritura es clara, en que la salvación es el bondadoso e inmerecido regalo de Dios (Efesios 2:5, 8) que sólo está disponible a través de la fe en Jesucristo (Hechos 4:12).

Juan 3: 17: Porque no envió Dios a su hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.

Romanos 5:10: Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados por Dios por la muerte de su hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida.

Efesios 1:7:

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