EL AGUA DICE que la queja y el Agradecimiento son polaridades

JUAN CARLOS ARIAS

MEDITACION AL AGRADECIMIENTO , PERO...

EL AGUA DICE que la queja y el Agradecimiento son polaridades, por lo tanto desde hoy no excluyo a ninguna.

Hasta ahora he estado alimentado a mis quejas y he descuidado mis agradecimientos, lo útil es invertirlos para dejarme guiar por esas gracias cósmicas que son mi cuerpo y mi espíritu. Por Favor mente, te pido que desde hoy, sigas segundo a segundo al Agradecimiento.

Hoy comprendo que cuando lo tienes todo o nada y piensas que te falta algo, creo, es cierto, me falta la acción de agradecer. Agradecer la vida, agradecer el hecho de respirar, de poder abrir los ojos y darle la bienvenida a un nuevo día.

UNA sola queja, por mínima que sea produce un rayón en el vidrio,

VARIAS , astillan mi cuerpo, formando una grieta que arrugan mi cara y mi corazón.

MUCHAS QUEJAS , me desconectan de la vida, yo creo que muchas quejas no me permitirían apreciar ni siquiera, el colorido plumaje de un pato mandarín . Muchas quejas no me dejan ver, el amor dedicado que me es dado por mis padres o los minutos eternos que me da mi pareja mientras yo le dedico horas de cuestionamientos, cuando en los momentos de compartir , son más mis inconformidades y menos o casi nulas las bendiciones por mi parte a lo cotidiano.

Muchas quejas borran los pensamientos que una vez guardé en la caja de zapatos.

Recuerdo la vez que choqué el carro, previo al accidente, estaba yo chocando todos los días de frente contra todo a mi alrededor, a mi carro no le quedó otra cosa que tomar mi energía y de paso, en vez de agradecer que sobreviví al accidente, continuaba desde la queja cuando lo útil es honrar y agradecerle a la Vida por haberme permitido quedarme en ella.

Agradecer el hecho de amar, de decir te quiero a mis seres queridos. Agradecer el hecho de poder sonreír, respirar, pensar, sentir, añorar, llorar .

Cuando mi alma canta, puedo sonreír, hacia afuera y hacia adentro y viceversa.

Ante la encrucijada de 3 caminos, agradezco inclinarme hacia la opción de decir me gusta y a la flexibilidad de poder transformar un no me gusta en… lo tomo. Tenemos que salir del camino de las quejas para entrar en el sendero del agradecimiento.

Al principio cuesta mucho agradecer incluso al aire que respiramos, pues, ignoramos las abundancias que nos fueron dadas por el Cosmos.

Cuál es la música más hermosa ?, las voces de mis seres queridos, por eso las busco siempre con la palabra presente, en una llamada, en un abrazo y hasta en un correo.

Doy gracias por escuchar las estampidas y los motores del tráfico, ustedes forman parte de mi viaje , me acompañan y me enseñan a apreciar más el sonido del mar, el canto de los pájaros y hasta el silencio de las montañas. A veces nos quejamos incluso con nuestras palabras de saludos con sonidos que gimen de dolor, apatía y desgano, acompañado de un buen gesto poco amigable. Hoy veo aquellas quejas disfrazadas de complacencia cuando mi cara decía lo contrario.

Nos quejamos mucho cuando nos toca pagar y agradecemos poco cuando nos toca

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