LA VERDAD SOBRE LOS ENGAÑOS DE LA RELIGIÓN: ATEÍSMO

LA VERDAD SOBRE LOS ENGAÑOS DE LA RELIGIÓN: ATEÍSMO

Desde hace mucho tiempo las grandes mentes en la historia han querido descubrir cuál es el origen de todo lo que existe. Después de muchos pensamientos se decidió nombrar este principio u origen “Dios”. Por mucho tiempo se consideró esto como una verdad innegable. Pero, en la actualidad hay una gran cantidad de personas que lo niegan sin temor a equivocarse. Estas personas han adoptado el nombre de ateos, ¿a qué se debe las creencias de los ateos?, ¿qué originó ese cambio? Y si Dios no es el creador de todo el mundo a nuestro alrededor y nosotros mismos, ¿quién es el responsable?, todo esto se explicará a continuación.

En la edad media la religión era una doctrina que debía ser aceptada por todos sin excepción; de lo contrario sería condenado como hereje, lo cual llevaba a juzgamientos severos, incluyendo, la hoguera, tortura y muchos otros métodos brutales. Sin embargo, todo esto cambio con el movimiento intelectual denominado Ilustración. Durante la ilustración, la religión se convirtió en un voto personal. Pero, lo que realmente creo la controversia, ahora conocida como ateísmo, ocurrió en 1680 con la aparición de un cometa que alboroto a toda Europa. La mayoría de la población lo asoció como un objeto divino y una forma de castigo para los infieles. Como se sabe hoy en día; un cometa es un acontecimiento natural, no un milagro. La idolatría y la superstición hicieron una conexión entre el cometa y lo divino. Una vez descubierto esto, se puso en duda la divinidad y en consecuencia la validez de Dios. Como ya no había amenaza de ser condenado de hereje, esta forma de pensar se expandió y evolucionó de dudar a Dios a su negación directa: ateo. Aunque se niega a Dios, se ha comprobado que el idolatrismo (superstición) es peor que el ateísmo en sí. Y tampoco el hecho de observar que a personas de moral débil y a las que no se les podría atribuir demasiadas cualidades positivas, viven en muchos casos mejor que aquellos que van todos los días a rendir culto y a pedir a su “Dios” que le ayude en su día a día o que solucione un problema que tienen. 

Lo que nosotros creemos es que la religión no es indispensable para llevar una vida honesta, lo que si queda claro es que éste debate no se zanjará nunca, porque lo que creemos es que nunca sabremos que hay después de la muerte y qué hubo antes de la vida. Sólo nos queda añadir que en la tolerancia de las personas reside la capacidad de respeto hacia el prójimo, al margen de sus creencias. Recalcamos que, si la gente creyese en su “Dios” de forma privada y personal; no tendríamos ningún problema y los dejaría solos. Hay gente que cree en la existencia de otros ¨Dioses¨, y no nos dedicamos a refutarlos. Pero cuando esa creencia deja de ser personal y trata de imponerla a los demás, muchas veces a la fuerza e incluso asesinando, ahí si se vuelve nuestro mayor problema.

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